“Estimados pasajeros, con el consentimiento del gobierno mexicano, este vuelo es operado por una tripulación extranjera. Nuestros pilotos no están siendo utilizados en este momento, sino que personal de Malta y Lituania se encargará de llevarlos a su destino, aunque esto esté prohibido por la ley. Disfrute su vuelo”.
El mensaje anterior es una realidad y debería incluirse en los amables saludos que escuchamos de las aerolíneas a bordo de un vuelo. Se trata de lo que ocurrirá a partir del 1 de diciembre en vuelos de Volaris como pasó hace un par de años con vuelos de VivaAerobus.
Resulta que el fabricante de sus motores les ofrece sustituir los aviones en lo que les dan mantenimiento, encuentran piezas y solucionan los retrasos para tener al día la flota. Les manda aeronaves de Malta y Lituania con todo y tripulación. Lo que la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA) ha considerado que traiciona la soberanía, viola la Constitución y otras leyes de aviación.
Para ASPA, eso “afecta directamente los derechos laborales de los pilotos mexicanos”.
Anoche en MILENIO Tv conversé con el capitán José Suárez, secretario de prensa de ASPA. Me dijo que lo que están pidiendo es que los aviones extranjeros sean operados por la tripulación mexicana, salvaguardando su fuente de empleo, sus ingresos y cumpliendo con la ley, que establece que las aeronaves mexicanas deben ser tripuladas por pilotos nacidos en el país.
Suárez me alertó que cuando VivaAerobus hizo lo mismo sí hubo pilotos mexicanos afectados, pues les rescindieron el contrato. Y suponiendo que ahora no los corran, sus vuelos serán menos y, por lo tanto, disminuirán sus percepciones.
En esta época, considerada temporada alta, los pilotos aceptan operar más vuelos para tener más ingresos y prestaciones. Si una tripulación extranjera operará algunas rutas, los pilotos mexicanos no podrán aprovechar la alta demanda de su trabajo como en años anteriores.
Lo peor, me dijo Suárez, es que los pilotos de Volaris no pueden externar en público su rechazo, pues son sancionados y despedidos de inmediato.
El sindicato seguirá llamando a que se eviten este tipo de prácticas, que ya han utilizado estas dos aerolíneas, para que se revoque la autorización y se restablezca el cumplimiento del marco legal que protege el espacio aéreo nacional, la seguridad operacional y el empleo de miles de pilotos mexicanos.
Mientras eso pasa, ¿a disfrutar el vuelo?