Después de un largo proceso de negociación en el Congreso de Estados Unidos, el 7 de agosto pasado, el Senado festejó la aprobación de la iniciativa de Ley de Reducción de la Inflación (IRA, por sus siglas en inglés), promovida por el gobierno del presidente Joe Biden.
¿Por qué esta iniciativa es relevante para México? Porque contiene una serie de disposiciones y medidas que impactan favorablemente en la creación de empleos, innovación y desarrollo de la industria automotriz: primero, incluye créditos fiscales de hasta 7,500 dólares para la adquisición de vehículos eléctricos nuevos y de hasta 4,000 dólares para usados. El principal requisito que cumplir es que las baterías eléctricas y sus materiales deberán proceder de Estados Unidos o de países socios de libre comercio. Además, los vehículos deberán ser ensamblados en América del Norte.
Incluir a Norteamérica en una ley es un paso muy importante para la creación de una región fuerte, competitiva y humanista. Con ello, se reafirma el compromiso de fomentar una cadena de suministro y producción automotriz integrada entre México, Estados Unidos y Canadá.
Es un esfuerzo de alinear una política doméstica a una visión regional más amplia. Originalmente, la iniciativa de ley consideraba aplicar el crédito fiscal solo a los vehículos eléctricos fabricados en Estados Unidos, lo que hubiera dañado a nuestra industria automotriz. Como resultado de un intenso proceso de diálogo y diplomacia, se logró hacer extensiva su aplicación a Norteamérica.
Para competir globalmente como región, es necesario continuar profundizando la integración productiva y fortalecer las cadenas de suministro entre los tres países.
Una Norteamérica fuerte se traduce en crecimiento económico, innovación, generación de empleos, desarrollo de tecnología, flujos de comercio e inversión. Asimismo, cumple el objetivo de ser autosuficiente en ciertas industrias estratégicas y no depender de regiones lejanas.
México representa una parte indispensable para la competitividad de la industria automotriz de Norteamérica y constituye un eslabón estratégico en su cadena de valor. Trabajar por una economía complementaria es clave. En la medida en que continuemos profundizando nuestra integración, tendremos mejores condiciones para participar con éxito en los mercados internacionales.
La aprobación de esta iniciativa de ley beneficia a México de muchas maneras, toda vez que la industria de vehículos eléctricos representa una industria de innovación, alta tecnología y desarrollo del talento humano. Posiciona a México como un socio confiable y un destino competitivo para recibir inversiones productivas.
Al insertarnos en la cadena de valor de esta industria en expansión, podemos adoptar nuevas tecnologías y promover la investigación e innovación para la transformación de una industria basada en motores de combustión interna de hidrocarburos a una nueva sustentada en electricidad. Ofrece también la oportunidad de una mayor generación de divisas por medio de nuevas exportaciones y una derrama económica significativa.
Este nuevo enfoque regional ocurre en un momento muy relevante en la coyuntura mundial y regional, en la que se busca desarrollar cadenas de suministro con menos dependencia de Asia. Todo ello tiene un impacto positivo, dado que la industria de vehículos eléctricos podría sentar un buen precedente para otras industrias estratégicas y en expansión dentro de Norteamérica, como la de semiconductores eléctricos y la de equipo médico.
Esperemos que esa iniciativa sea ratificada por la Cámara de Representantes de Estados Unidos, donde el Partido Demócrata del presidente Biden tiene mayoría. Sería la primera ley expedida este año en Estados Unidos que reconoce a Norteamérica como región. Le confiere una nueva identidad regional, desde una perspectiva no solo comercial e industrial, sino también social y cultural.
Esto ayuda a continuar el esfuerzo de construir una Norteamérica integrada, mejor educada, con un desarrollo compartido, menos dependiente del exterior, para beneficio de la vida de nuestros pueblos.
Esteban Moctezuma Barragán
Embajador de México en Estados Unidos de América