El 18 de junio de 1947, el Sr. Andrés Herrera Casasús, mi hermano mayor, logró filmar la arribada de más de 40 mil tortugas lora en la playa de Rancho Nuevo, Mpio. de Aldama, Tamaulipas, a 100 kilómetros al norte de Tampico.
Este descubrimiento logró dar a conocer lo que ningún científico había logrado con anterioridad: ver a una tortuga desovando de día y no se sabía nada sobre los hábitos y lugar de anidamiento de esa tortuga.
Por las afirmaciones de gente de la zona, se sabía que la arribada acontecía entre abril y junio.
Entre 1946 y 1947, el Sr. Herrera despegó en su avioneta Cessna 140 en 33 ocasiones, y voló 66 horas sobre la costa a lo largo de más de 100 km. en búsqueda de las tortugas, con su cámara bajo el asiento de su avioneta buscando la oportunidad de presenciar y filmar la arribada.
El 18 de junio de 1947 se encontró con un espectáculo maravilloso: de las aguas del mar brotaban más de 40 mil gigantescas tortugas a lo largo de una milla de la playa.
Manifestaba el Sr. Herrera: “Salieron desde las 9:00 de la mañana hasta la 1:00 de la tarde y llegaron hasta un médano cercano de un metro y medio de altura aproximadamente, depositando en la arena de 150 a 170 huevos cada una, en una faja de unos 20 m de anchura.
“Tal es la cantidad de tortugas desovando al mismo tiempo, que unas sacan los huevos que otras han puesto. Cuando regresé a mi avión no podía despegar porque las tortugas pasaban por debajo de él”.
Para evitar el saqueo de los nidos, la película solo se mostró ante familiares y amigos. 14 años después, en enero de 1961, el Dr. Hildebrand, Prof. Asociado de Biología Marina de la Univ. de Corpus Christi, al saber del suceso, se puso en contacto con el Sr. Herrera para que la mostrara a la comunidad científica durante el “Congreso Anual de la American Society of Ichthyologists and Herpetologists”, llevado a cabo en Austin, Texas, en marzo del mismo año.
Resuelto el gran misterio de la tortuga lora, los investigadores, universidades, etc. de México y el extranjero vuelcan su atención sobre el descubrimiento, y promueven la protección de esa especie de tortuga marina más amenazada del mundo.