Ha anunciado Claudia Sheinbaum que se hará una encuesta entre la población, de la cual se encargará Morena, para saber qué opinan sobre el Poder Judicial.
La campaña del presidente López Obrador contra el Poder Judicial iniciada después de que se retirara el ministro Zaldívar, su amigo, ha creado esta sensación en la opinión pública de que todo lo que está mal en el sistema de justicia en el país tiene que ver con jueces y magistrados.
Las cosas son más complicadas.
El sistema de justicia tiene más de una parte; sus defectos, omisiones, fracasos, o logros, tienen que ver con todas ellas. Con los policías, los ministerios públicos y fiscalías y los jueces y magistrados.
Ahora que la presidenta electa ha propuesto una encuesta sobre el Poder Judicial, no estaría mal que lo ampliara a esas otras partes de nuestro sistema de justicia. O también podría arrancar su nuevo cuestionario revisando la encuesta que ya hace el Inegi.
En marzo de este año se publicó la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental 2023. La investigación tiene como objetivo que los ciudadanos evalúen los trámites, pagos, servicios públicos y otros contactos con autoridades. Se evalúa su eficiencia y su corrupción, entre otras cosas. El objetivo es dar elementos para tomar decisiones de políticas públicas.
Se hace en 46 mil viviendas. En todo el país.
¿Qué dice?
Por ejemplo: 59 por ciento tuvo experiencias de corrupción en su contacto con elementos de la seguridad pública; 21.2 por ciento cuando acudió a ministerios públicos y fiscalías; 16 por ciento en su contacto con tribunales. Por cierto, en Ciudad de México, las experiencias de corrupción frente a ministerios públicos o la fiscalía local son de 34.5 por ciento, por encima de lo nacional.
En términos de confianza, ministerios públicos y fiscalías están, igual que juzgados, en los últimos lugares, 38 y 39 por ciento, respectivamente. Por comparar, los hospitales públicos logran 68 por ciento de confianza. Los órganos públicos autónomos, 67. No nos debe extrañar que los últimos tres lugares los ocupan los legisladores, los partidos políticos y las policías.
Es cierto, el sistema, todo, de seguridad y justicia en México no funciona.
Hay que reformar muchas cosas. Votar por los jueces no soluciona nada. Las cosas son mucho más complicadas que eso.