Política

Abuso de poder, corrupción e impunidad en el futbol mexicano

  • Voz Ciudadana
  • Abuso de poder, corrupción e impunidad en el futbol mexicano
  • Alfredo Alcalá Montaño

Todas y todos somos iguales ante la ley, sin embargo, el poder político y económico llega a corromper, a tal grado que hoy día el futbol mexicano, es una muestra clara de cuando las instituciones fallan, o son débiles, florece la corrupción e impunidad.

Es decir, para que los actores políticos y sociales, respeten la ley, no abusen del poder, o causen algún daño a la sociedad, se debe contar con un árbitro imparcial y fortalecido, para que nadie atente contra la seguridad y el estado de derecho.

Por ejemplo, si alguien insulta, agrede, o lesiona a un policía, el Estado debe actuar de inmediato, y no importando si la persona que causo daño, lesiones, etc. Es influyente, rico, o poderoso, se debe actuar con todo el peso del Estado, nadie puede estar por encima del Estado, nadie puede estar por encima de la paz, la seguridad y el bien común.

Lo mismo es a la inversa, al tener un poder conferido por parte del Estado, sea policía, funcionario, representante, militar, juez o magistrado, no se puede hacer mal uso de ello, de lo contrario, el mismo Estado debe actuar con dureza, para evitar que se repite la acción. Como el caso de algún funcionario que utilice su espacio de poder e influencia, para beneficiarse, o beneficiar a alguien cercano, o el policía, que se corrompe o abusa del poder conferido, ahí debe actuar el peso del Estado, es decir del conjunto de instituciones, que deben procurar e impartir justicia.

CASO DE LOS ARBITROS Y EL FUTBOL MEXICANO

Hace unos días, ocurrieron un par de incidentes en dos partidos de Futbol, cuando el jugador del América, Pablo Aguilar Benítez, (Paraguayo) que al final del juego entre Xolos y América, le dio un cabezazo al árbitro del encuentro, Fernando Hernández Gómez.

Y en otro partido, el jugador del Toluca, Enrique Triverio (Argentino), fue castigado por empujar al silbante Miguel Angel Flores durante el partido entre el Toluca frente y Monarcas.

El tema dejo de ser futbolístico, cuando los dueños del futbol, presionaron a la Federación Mexicana de Fut Bol, para que la sanción fuera mínima, es decir, torcer el Reglamento de Sanciones de Clausura 2017, que dice, de acuerdo al artículo 33 (apartado B), “agredir a los oficiales del partido acarrea: 1 año de suspensión y una multa económica (36 a 450 UMAS, -Unidad de Medida y Actualización, antes salarios mínimos-)”.

Sin embargo, abusando del poder y la impunidad, solo les impusieron a los jugadores unas penas mínimas, a Enrique Triverio, Siete partidos y a Pablo Aguilar (10 partidos de sanción.

Es decir, la justicia quedo de lado, el reglamento no importaba, porque lo económico era más importante para los dueños del futbol, que los jugadores respetaran la autoridad, mas importante su negocio, que fortalecer a quien imparte justicia. Sin mencionar que millones de niños y niñas, adolescentes y personas adultas, miran el futbol, gran ejemplo de impunidad es lo que proyectan.

Si esto hacen en un partido de futbol, es cuestionable, todo el futbol mexicano, ¿que garantiza, que entre equipos no lleguen diferentes acuerdos en lo oscurito?, ¿pagaran todos sus impuestos, o pasara como el grupo Pachuca, que le gusta pagar sus impuestos, la luz y el agua, con balones y boletos?

Es momento de poner orden en la FEMEXFUT, y sobre todo que se garanticen los derechos laborales, de los árbitros, futbolistas, y todos aquellos que forman parte de los equipos de futbol.

Hasta la fecha los jugadores no han formado un sindicato, por la presión de los dueños.

Pero hoy son los árbitros, quienes tal vez perciban menos dinero que los jugadores estrellas, pero su capacidad organizativa y la unión, logro una histórica y aleccionadora huelga de árbitros, para evitar el abuso de autoridad, y que, en el futbol, como en todo, se respete la ley, la norma, los reglamentos, sea quien sea.

Y gracias a ello, las sanciones no se elevaron, solamente se aplicó el reglamento, sin torceduras, sin presiones.

Se habla que la huelga de árbitros en Liga MX, dejó pérdida económica de 50 mdp, pero la culpa no es de quienes pidieron justicia laboral, la culpa es de quienes quisieron torcer la ley.

Este es el verdadero costo de la corrupción, nada hubiera ocurrido, si se aplica la ley.

Que se fortalezca la ley, y no el poder económico, los derechos laborales y la dignidad, son y deben ser garantizados por el estado, hasta en el futbol. Es momento de revisar que es lo que pasa en otras disciplinas, saber si las normas o reglamentos están funcionando.

Me encanta el futbol, pero un partido de futbol no es más importante que la dignidad de las personas, la justicia laboral, ni más importante que las leyes, normas y reglamentos,

Debe quedar claro, que los árbitros juegan un papel importante dentro de un partido de Futbol, son quienes se encargan de que se cumpla el reglamento (la norma establecida), y a su vez imparten justicia (como jueces).

Es decir, son policías y jueces al mismo tiempo, por lo que su actuar debe ser impecable y sin dolo.

Pero lo más importante, los jugadores deben respetar la autoridad, ya que, de lo contrario, estarían afectando no un individuo, sino a todo el sistema deportivo del futbol.

Erradicar el abuso del poder, la impunidad y la corrupción, es un proceso estructural, permanente y no podemos permanecer ajenos, ello está presente, hasta en un partido de futbol.

“Por una sociedad libre de discriminación y violencia”

Twitter: @alfreduam
alfreduam@yahoo.com.mx
FB: Alfredo Alcala Montaño
www.alfredoalcala.mex.tl

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Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
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