Política

En el SEM todo sigue igual

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Ante la oleada de críticas por el nombramiento de Pedro Salmerón Sanginés como embajador de México en Panamá, acusado de acoso sexual por alumnas del ITAM, Andrés Manuel López Obrador defendió su decisión diciendo que era el mejor experto en Pancho Villa, debajo de Friedrich Katz.

Y eso ¿qué relación tiene? Un historiador no hace un embajador. 

Katz, distinguido especialista en la Revolución Mexicana que sí gozó de prestigio académico, no hubiera sido un buen embajador de Estados Unidos en México. Son profesiones distintas.

En este contexto de protesta feminista, recordar a Doroteo Arango fue desafortunado, pues el mujeriego revolucionario inspiró la frase: “como Pancho Villa con una vieja en cada orilla”. 

El presidente justificó la propuesta de su historiador favorito, afín al revisionismo histórico, promotor de la visión maniquea de que las virtudes son de los liberales y de los revolucionarios, mientras que los vicios pertenecen a los conservadores y a los porfiristas.

El presidente es tan fuerte, goza de tan alto respaldo popular, que se da el lujo de repetir errores sin mayores consecuencias. Al inicio del gobierno, nombró a Salmerón director del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México, y luego, ante la justificada indignación, lo destituyó por calificar como “jóvenes valientes” a los asesinos de Eugenio Garza Sada. Pero ahora lo reivindica en un puesto en el que menos está capacitado.

Sin duda, Salmerón será embajador, pues el Senado, dócil al Ejecutivo, ratificará la designación presidencial, aunque el nominado carezca de todo oficio diplomático, sea procaz y lépero, e indigno de representar a México. 

¿Qué relación hay entre Salmerón y Panamá? Que sepamos ninguna. Pero todo se vale cuando hay que justificar lo injustificable.

En el absurdo, podríamos inventar una historia ficción escrita por Salmerón de un imaginario ataque de Villa al Canal de Panamá para frenar al imperialismo yanqui en el corazón de América Latina, restituir la soberanía del canal a los panameños y echar al mar a los gringos, a principios del siglo XX. 

Como si fuera precursor del Che en Bolivia, sigue la narrativa ficticia, el comandante de la División del Norte encabezaría una incursión guerrillera para expandir la Revolución Mexicana en Panamá, hacer realidad el sueño de la unidad latinoamericana y convocar a un nuevo Congreso Anfictiónico que declare a la Ciudad de México-Tenochtitlan, capital de Latinoamérica, como lo sonó el propio Simón Bolívar, siempre bajo el respeto a la no intervención y la autodeterminación de los pueblos. 

Y así el “embajador” seguiría por el estilo escribiendo en la residencia de México, mientras paladea un ron Abuelo 12 años, luciendo su nuevo sombrero “Panamá”, (hecho en realidad en Ecuador con jipijapa), sin distraerse de labores diplomáticas fifís, pues para eso está el segundo en la embajada (el diplomático de carrera que sí trabaja).

Hace décadas ingresamos al Servicio Exterior Mexicano (SEM). Desde entonces todos los presidentes en turno han ejercido su facultad de nombrar embajador a políticos en desgracia sin ninguna promesa de cambiar.

López Obrador prometió el cambio, tal como lo expresó por escrito en su Proyecto de Nación. Aseguró que no iba a usar los puestos de embajadas y consulados para premiar a gobernadores y amigos.  

En el SEM todo sigue igual.

@AGutierrezCanet

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Agustín Gutiérrez Canet
  • Agustín Gutiérrez Canet
  • gutierrez.canet@milenio.com
  • Periodista y Embajador de México en retiro. Licenciado en comunicación (U. Iberoamericana). Diplomático de carrera, representó a México como embajador en Rumania (2013-2016), en Finlandia, concurrente en Estonia (2008-2013) y en Irlanda (1995-1996). Fue cónsul general en Hong Kong y en Macao (1991-1995), ministro y jefe de cancillería en España (1989-1991), consejero en Italia (1985-1986) y representante alterno ante la FAO en Roma (1986-1987). En la Secretaría de Relaciones Exteriores fue director general de Comunicación Social (1982- 1985) y subdirector general de Prensa Extranjera (1980-1982). De 2003 a 2005 fue coordinador de Información Internacional en la Presidencia de la República y director del Departamento de Estudios Internacionales de la Universidad Iberoamericana (1998-2002). / Escribe todos los jueves su columna Sin ataduras
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
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