Ayer fue asesinado el candidato a alcalde de Cajeme, Sonora, Abel Murrieta, del partido Movimiento Ciudadano, un hombre que se había desempeñado como procurador de su estado y además fue abogado de la familia LeBarón. Traigo el caso a mención pues es preocupante que en este momento en nuestro país estén siendo blanco de ataques aspirantes a autoridades municipales principalmente.
Esto habla del nivel de penetración que ha tenido el crimen en esta esfera, donde se pierde la lucha contra los grupos delictivos al ser ésta una acción exclusiva de las autoridades federales. Mucho se ha hablado de la gran cantidad de negocios y de protección que reciben los delincuentes sobre todo en este nivel de autoridad que queda claro que quienes no le convienen como candidatos simplemente los asesinan. Según el estudio multicitado de Etellekt Consultores, “Informe de Violencia Política en México 2021” se han registrado en México 282 agresiones en contra de aspirantes y candidatos a diversos cargos de elección popular, llama la atención que 7 de cada 10 ataques en contra de candidatos son justo hacia aquellos que buscan cargos municipales, candidatos a alcaldes o miembros de planillas entre aspirantes a síndicos y regidores.
Los ataques se han registrado según este reporte en 205 municipios del país , casi el 10 por ciento del total Veracruz es el que más candidatos registra asesinados con 45 víctimas le siguen los estados de Guerrero (23), Oaxaca (20), Michoacán (20), Puebla (18), San Luís Potosí (15), Estado de México (14), Tabasco (14), Quintana Roo (12), Ciudad de México (11) y Guanajuato (10). Estas 11 entidades concentran el 72% de las 282 víctimas globales.
Según un recuento hecho por este medio, la violencia contra los candidatos y funcionarios electorales no descansó ni un solo día durante los primeros 10 días del mes en que se registraron 11 ataques armados que costaron la vida a dos personas, hirieron a otras seis y privaron de su libertad a dos más.
De hecho los ataques más recientes en Guanajuato han sido justo contra aspirantes a alcaldes y regidores siendo escenario de estos ataques los municipios de Juventino Rosas, Apaseo el Alto y Dolores Hidalgo. En el caso de Juventino Rosas donde se asesinó a Juan Antonio Acosta, se tiene identificados como agresores a personas pertenecientes al cártel Santa Rosa de Lima.
Desafortunadamente vemos cómo el crimen en México también vota y elimina a todos aquellos candidatos que no son de su conveniencia.
Miguel Ángel Puértolas
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