
El 17 de octubre conmemoramos 72 años del reconocimiento del derecho de las mujeres a votar y ser votadas. Fue a través del decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación que se promulgó la reforma constitucional a través de la cual se hizo posible tal reconocimiento.
Esta reforma fue el resultado de las luchas de las valientes mujeres sufragistas de nuestro país. No podemos dejar de recordar a Hermila Galindo, quien con sus acciones nos fue abriendo paso para el ejercicio de nuestros derechos políticos.
Galindo destacó por sus ponencias en los Congresos Feministas celebrados en Yucatán en el año de 1916, a pesar de que no estuvo presente en los mismos. A través de los escritos que envió se manifestó en contra de los prejuicios que limitan a las mujeres, pugnando por la igualdad de derechos entre hombres y mujeres, así como la emancipación de estas últimas (1).
Otro antecedente histórico importante fue el Congreso de la Liga Panamericana de Mujeres en 1923, celebrado en México; a través del cual se determinó enviar al Congreso de la Unión la petición del reconocimiento de la igualdad de derechos políticos para hombres y mujeres.
Debe recordarse también la reunión del 6 de abril de 1952, en la que más de veinte mil mujeres, exigieron al Presidente Ruiz Cortines que realizara la reforma constitucional que a la postre reconoció nuestro derecho a votar y ser votadas.
Sin duda la reforma constitucional de 2014, a través de la cual se incorporó el principio de paridad de género en nuestra Carta Magna, fue un avance en el ejercicio de nuestros derechos, pues obligó a los partidos políticos a que postularan mujeres en al menos en el 50 por ciento de sus candidaturas de elección popular.
No obstante, dicha reforma no garantizaba que la integración del legislativo fuera paritaria, puesto que la misma se acotaba a las candidaturas.
Fue hasta el 6 de junio de 2019, a través de la reforma constitucional conocida como “Paridad Total/Paridad en Todo” que se incorporó el principio de paridad en la integración de los poderes públicos y en todos los niveles de gobierno (2). Lo anterior, representó un avance en la igualdad sustantiva en nuestro país.
Las mujeres hemos luchado día a día por ganar los espacios que ocupamos, en los diferentes ámbitos laborales, sociales y políticos, y lo reitero, luchamos, porque todos los días combatimos los estereotipos que nos limitan, los cuestionamientos que nos hacen, sólo por el hecho de ser mujer.
Por eso hoy, todo mi reconocimiento a esas mujeres sufragistas que con su movimiento fueron allanando los caminos para que las mujeres podamos hoy libremente no sólo acudir a las urnas, sino ocupar espacios de decisión. Pero también mi reconocimiento a todas las mujeres que desde su trinchera luchan cada día por el respeto de nuestros derechos.
(1) Tuñón Pablos Esperanza y Martínez Vega Juan Omar. La propuesta político-feminista de Hermila Galindo: Tensiones, oposiciones y estrategias. https://estudiosdegenero.colmex.mx.
(2) Medina Espino Adriana. La paridad de Género en cargos unipersonales. El caso de las gubernaturas en México. http://www.diputados.gob.mx>sia>redipal.