En las primeras horas del viernes 1 de agosto en Estados Unidos (alrededor de las 10 de la noche del jueves en México), el gobierno de Donald Trump comenzará a aplicar un arancel de 30 por ciento a todos los productos mexicanos que no cumplan con las reglas del T-MEC; es decir que de las 505.9 mil millones de dólares en mercancías que se exportan a ese mercado, 75 mil 890 millones no cumplen con las reglas y pagarán impuesto.

De acuerdo con información de la Secretaría de Economía y expertos, esto equivale a 15 por ciento de todo lo que se manda a esa nación en un año; a los primeros cinco meses de 2025 estos productos equivalen a 30 mil 140 millones 522 mil 759 dólares, de acuerdo con un reporte de Banco Base.
“Con esto los aranceles ponderados para las importaciones mexicanas en Estados Unidos a partir del primero de agosto ya se ubicarían en 13.7 por ciento, desde el 11.9 por ciento vigente actualmente (sumando los que se fueron aplicando desde que regresó Trump a la presidencia)”, estimó el grupo de análisis de Banamex.
Con este detalle México se mantiene aún atractivo respecto a naciones como Japón o Corea del Sur, aun cuando la primera logró un acuerdo comercial con la administración en Washington; pero siempre y cuando se cumpla con el T-MEC.
¿Qué productos incumplen?
De acuerdo con información de la Oficina del Censo de Estados Unidos, algunos de los productos que cuentan con un menor cumplimiento de T-MEC son acero y el hierro, con uno por ciento de cumplimiento sobre lo que exporta en regla de origen; Instrumentos ópticos, fotográficos, médicos o quirúrgicos, con 7.3 por ciento; bebidas, licores y el vinagre, con 9.6 por ciento.

También están muebles, ropa de cama, colchones, luminarias y lámparas fijas con un cumplimiento de 15.6 por ciento; de reactores nucleares, calderas, maquinaria y sus partes con 17.5 por ciento, y preparaciones de cereales, harina, almidón o leche con 33.2 por ciento.
El subdirector de Emerging Markets Political Risk Analysis (Empra por sus siglas en inglés), Yussef Farid Núñez, detalló que los productos que no entran dentro del T-MEC es porque muchos de sus insumos no están dentro de la región.
“Particularmente lo podemos ver en aluminio, acero y algunos componentes de la cadena de suministro de las autopartes que no cumplen con la regla de los componentes que deben de ser de hasta 75 por ciento de productos norteamericanos”, dijo.
“En esta industria lo que vemos también con la metalurgia es que llegan productos alterados de países asiáticos, particularmente de China, en el que se lleva a cabo una serie de procesos para mezclarlo con componentes mexicanos, en donde el resultado da un revoltijo, por así decirlo informalmente, en el que el producto está alterado”, argumentó.

¿Cuál es la regla de origen en agricultura y minería?
En relación al capítulo 4 del acuerdo trilateral, se establece que las mercancías originarias son las que son totalmente obtenidas o producidas enteramente en el territorio de una o más parte si cumple con algunos requisitos:
Es un mineral u otra substancia de origen natural extraídos u obtenidos en México, Estados Unidos o Canadá.
Mientras que una planta o producto de este mismo como un vegetal o un hongo, deberán haber crecido así como haber sido cultivadas, cosechadas, recogidas o recolectadas en la región.
En el caso de los animales deberán nacer, vivir o haberse criado en alguno de los tres países, así como la mercancía obtenida de un animal con vida.
Se incluyen animales obtenidos de la caza ya sea producto de una trampa, pesca, recolección o captura realizada en alguno de los tres países socios del T-MEC.
También se mencionó la mercancía obtenida de la acuicultura en alguna de las tres naciones respecto a los peces, crustáceos u otra vida marina obtenidos del mar, lecho o subsuelo marino fuera del territorio de las partes y, conforme al derecho internacional, “fuera del océano territorial de una que no sea parte de barcos que están registrados, listados o matriculados en una de las tres naciones y con derecho a enarbolar la bandera de los países que son parte del acuerdo trilateral”.
¿En el caso de la manufactura?
El acuerdo dice que una mercancía remanufacturada es originaria sólo si cumple con los requisitos aplicables del Artículo 4.2 (Mercancías Originarias); y un material recuperado que no sea utilizado o incorporado en la producción de una mercancía remanufacturada es originario sólo si cumple con los requisitos aplicables del Artículo 4.2 (Mercancías Originarias).
Además establece que el valor del contenido regional de la mercancía no debe ser inferior a 60 por ciento bajo el método de valor de transacción, o bien no sea inferior a 50 por ciento bajo el método de costo neto.
En este sentido, el socio del área mercantil y financiero de Hogan Lovells, Juan Francisco Torres Landa Ruffo, precisó que las reglas de origen establecidas en el acuerdo apuntan que se debe acreditar el contenido regional, se tengan certificaciones tanto aduanales como periciales de origen de los materiales, y entre otras cosas más.
“Entonces, eso conlleva un proceso, así como un equipo en torno a las necesidades de cada compañía y un costo, por lo que las empresas optaron por dejar de cumplir con la red de origen y pagar 2.5 por ciento de arancel establecido bajo la Organización Mundial de Comercio (OMC) porque era más barato, simplemente por una cuestión económica”, explicó.
JJ