En México cada vez más personas están dejando de ser solo ahorradores para convertirse en inversionistas, de acuerdo con Alejandro Martínez Feres, director general de SAM Asset Management México, subsidiaria de Santander.
“Hay un cambio fundamental en cómo los individuos participan en los mercados. Cada vez más personas pasan de ser simples ahorradores a convertirse en inversionistas. Esa conversión, es una gran noticia”, dijo Martínez Feres.
Señaló que en los últimos 24 años, la industria de fondos de inversión pasó de representar 4.3 por ciento a 13.5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) , lo que significa que su participación se triplicó.
Además indicó que entre 2008 y 2025, 13 millones de nuevos clientes ingresaron al mercado de fondos, reflejando una creciente inclusión financiera y una mayor confianza en los vehículos de inversión formal.
Martínez Feres destacó que el crecimiento sostenido de la industria de fondos de inversión en México no es casualidad, sino el resultado de motores estructurales que fortalecen el sistema financiero y proyectan un potencial de largo plazo para el país.
El primero de estos motores es el bono demográfico, ya que el país cuenta con una pirámide poblacional favorable, en la que la base está integrada por una población joven que, según Martínez Feres, “será el motor de generación de nuevos ahorradores y nuevos inversionistas en el futuro”.
Explicó que esta estructura garantiza que haya una masa creciente de personas con capacidad de ahorro que buscarán instrumentos financieros para invertir su dinero.
“Vemos un bono demográfico sumamente atractivo en México. Notamos una pirámide poblacional bien favorable, en la que la base será el motor de generación de nuevos ahorradores y de nuevos inversionistas en el futuro”, dijo.
El segundo motor es la resiliencia de la economía mexicana, que, pese a los desafíos globales, mantiene su estabilidad y dinamismo.
Señaló que en un contexto de alta volatilidad internacional, “la economía mexicana demuestra una resiliencia sorprendente en los últimos años”, lo que refuerza la confianza de los inversionistas locales y extranjeros en el país.
“Vemos también una economía en México que es sumamente resiliente, notamos un dinamismo grande a nivel mundial, lleno de eventos importantes, y sin duda la economía mexicana está demostrando una resiliencia sorprendente”, comentó.
Finalmente, mencionó la inclusión financiera como el tercer motor estructural, aunque reconoció que aún queda trabajo por hacer, destacó los avances en la participación de la población en el sistema financiero formal.
Destacó que cada vez más personas no solo están ahorrando, sino convirtiendo su ahorro en inversión, lo que es un “ancla fundamental” para el bienestar económico del país.
“Un dato importantísimo es el tema de inclusión financiera, vemos cómo la inclusión viene mejorando de manera sumamente relevante”, dijo.
“Cada vez hay más gente participando del mercado de inversiones, primero ahorrando y después transformando su ahorro en inversión”, agregó Martínez Feres.
Ante este panorama señaló que la cultura financiera mexicana está cambiando, impulsada por el acceso a nuevas herramientas digitales y por la educación financiera.
Martínez Feres afirmó que esta combinación brinda confianza en que la tendencia de crecimiento puede mantenerse hacia adelante, sentando las bases para un desarrollo financiero sostenible en el largo plazo.
“Todo esto nos genera confianza y una apuesta importante por un potencial en el largo plazo. Vemos un potencial grande en el tema del ahorro transformado en inversión hacia adelante”, comentó.
Indicó que en comparación con otros países de la región, México tiene todo para crecer la base de inversionistas.
“Basta comparar las condiciones estructurales del país, la proporción que la industria de fondos de inversión ya representa como porcentaje en el PIB de otros países y que desde el 2008, 13 millones de nuevos clientes han invertido en fondos de inversión”, dijo.
Destacó que lo anterior refleja el interés creciente de pasar del ahorro a la inversión entre los clientes en México y una cultura en formación alrededor del uso productivo del patrimonio.
Martínez resaltó que en México, su subsidiaria administra más de 560 mil millones de pesos, lo que representa 10 por ciento de los activos globales del grupo, colocándola como la tercera gestora más grande del grupo empresarial Santander Asset Management.
Agregó que durante el último año, SAM Asset Management México registra un crecimiento de doble dígito de 15.7 por ciento al cierre de septiembre y una participación de mercado del 10.5 por ciento, con un aumento de 21 puntos base frente a sus principales competidores.
FM