El sonido de una sirena siempre pone los nervios de punta a la gente, pero para los rescatistas de Protección Civil es una llamada al deber, una mezcla de adrenalina, cansancio y, sobre todo, un compromiso por cumplir.
Hoy 19 de septiembre, cuando México recuerda la fuerza de la naturaleza tras los sismos registrados en 1985, los rescatistas también conmemoran su día; no con homenajes ni discursos sino haciendo lo que mejor saben: estar listos para ayudar.
“Fue derivado de aquellos sismos del 85 donde surge todo el esfuerzo, la coordinación de la ciudadanía, de los rescatistas que había en la Cruz Roja y el Ejército Nacional; nace en México a partir de esa catástrofe que fueron los sismos”, dijo el director de Protección Civil de Nuevo León, Erik Cavazos.
Entre las decenas de historias que se guardan tras el uniforme sobresalen varios ejemplos de vocación y entrega, y sus protagonistas lo cuentan a la plataforma MILENIO-Multimedios.
Víctor Hugo Olivo, inspector de la nueva División Ambiental de Protección Civil, desde 1997 se especializa en emergencias. Inició como socorrista a los 36 años y más tarde incursionó en la seguridad industrial. Hoy, además de su experiencia en rescates, carga con una historia personal que lo acompaña día a día: la pérdida de su hijo en un accidente vehicular.
“Va uno viendo cada accidente y cada accidente es diferente, pero al momento de querer relacionarlo con mi hijo no es lo mismo, porque uno está en el punto y cuando me pasó a mí el accidente que iba entrando de turno, entonces nada más recibí la llamada, pero ahí va haciendo uno poco a poco aún esas experiencias de cada accidente”, señaló Víctor Hugo.
“El ayudar a la gente, el recibir las gracias y el saludo en la calle de la gente, donde nos agradecen la atención, los servicios, pues hace que uno se sienta muy especial, y como que da uno un poquito más de lo que ha dado”, expresó.
Por su parte, Ramiro López Nájera, comandante operativo en jefe, suma 32 años como rescatista. Su carrera comenzó a los 16 años, y a pesar de no haber concluido inicialmente sus estudios, logró terminar la preparatoria. Hoy planea continuar preparándose con el respaldo de Protección Civil.
“Por tiempo o cuestiones acabo de terminar la preparatoria, pero ahorita en mis planes está hacer la licenciatura en Protección Civil”, mencionó.
El director de Protección Civil de Nuevo León, Erik Cavazos, resume lo que significa portar el uniforme.
“¿Cómo llegué? Es una larga historia, me empapé mucho en Protección Civil, me ha gustado tanto, esto ha sido mi vida por más de 25 años y bueno, yo creo que no cambiaría ningún trabajo por este que es algo donde hemos visto muchas cosas muy bonitas, desde como lo he comentado, desde las épocas de frío que hacemos los operativos carrusel, las lluvias, sequías y todo ese tipo de operativos, y bueno, también que tenemos a nuestros compañeros caninos, como ustedes lo han visto”, aseguró Cavazos.
Este Día Nacional de Protección Civil, más que un festejo se convierte en un recordatorio del valor y la humanidad de quienes, con casco en mano, guantes, botas y el corazón firme, han hecho de su vida una misión: salvar a los demás.
mrg
