Por Aidé García, Directora de Católicas por el Derecho a Decidir México
Hablar de aborto sigue siendo, en muchos espacios sociales, un tema controvertido. Esto no sólo se debe a los prejuicios sociales, sino también por la manera en que históricamente se ha discutido: desde el miedo, el prejuicio y la desinformación.
Los efectos de tratar el tema desde el estigma y los prejuicios religiosos impactan directamente la libertad y los derechos sexuales y reproductivos. Lo vimos hace unos días con la votación en el Congreso de Querétaro, donde se votó contra la despenalización del aborto pese a que existe una disposición de la Suprema Corte de Justicia de la Nación a favor del derecho a decidir.
Con esta realidad presente en nuestro país, creamos la campaña “El aborto es un hecho y decidir nuestro derecho”, cuyo fin es transformar la conversación pública sobre el aborto a partir de la empatía, la claridad, el respeto y la libertad a decidir.
Uno de los objetivos de la campaña es informar y contribuir a la despenalización social del aborto. A 18 años de la reforma en la Ciudad de México, y de 23 entidades del país con aborto legal a la fecha, es necesario dar un paso más: cambiar la percepción colectiva sobre un derecho que forma parte de la vida de muchas mujeres y personas con capacidad de gestar.
Para lograrlo, la campaña opta por una narrativa cercana, empática y realista de las mujeres y personas con capacidad de gestar. Mensajes como “Ejerciendo mi libertad, encontré nuestra dignidad”, “Mi elección no necesita tu opinión” o “Muchas abortamos, no es algo nuevo”, ponen el énfasis en quienes ejercen su derecho a decidir, visibilizando el aborto como un hecho cotidiano (más no banal) y parte legítima de las trayectorias de vida. Con el toque de Católicas, también compartimos mensajes como “Aborté y estoy en paz con Dios y conmigo misma” o, “Dios no castiga”, con los que buscamos contrarrestar aquellas narrativas que relacionan el aborto con el pecado y que se difunden desde una mirada conservadora y restrictiva de los derechos.
Abordar el tema del aborto en el espacio público implica importantes desafíos como las resistencias sociales, posibles rechazos y limitaciones para colocar mensajes en ciertos espacios donde persiste el estigma. Sin embargo, la campaña ha sido bien recibida en los lugares donde ha estado presente. Su acogida demuestra que sí es posible hablar de temas complejos desde la sensibilidad, sin perder la fuerza ni la claridad de sus mensajes.
Nuestra intención es clara: ocupar los espacios públicos como lugares de diálogo y transformación social, llevar nuestro mensaje a estaciones de metro y autobuses, acercar nuestros argumentos a la población en sus trayectos diarios, donde miles de personas coinciden, con el fin de difundir ideas y promover la reflexión en sus entornos laborales, familiares y comunitarios. Con ello, hemos logrado llegar a 18 millones y medio de personas en todo el país, gracias a nuestra presencia en territorio y redes sociales.
¿Qué sigue ahora? Llevar la conversación a más espacios, y levantar la voz a favor de la eliminación del aborto del Código Penal y estatales. Es hora de dar un paso adelante y seguir avanzando.
La campaña “El aborto es un hecho y decidir nuestro derecho” es una iniciativa de Católicas por el Derecho a Decidir que busca ampliar la discusión pública, diversificar los enfoques y promover un diálogo social basado en la empatía, la autonomía y el respeto. Impulsar una comunicación transformadora es fundamental para construir una sociedad donde las decisiones sobre nuestra autonomía se comprendan desde la libertad y la dignidad.
Porque sólo desde un diálogo respetuoso y empático, el derecho a decidir puede hacerse visible y pleno en la vida de todas las mujeres y personas con capacidad de gestar.
Conoce la campaña en: catolicasmexico.org
RRR