En nuestra edición de hoy le presentamos la historia respecto a las observaciones hechas por la Auditoría Superior de la Federación a las obras del finado Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México que suman más de 9 mil millones de pesos (de esos que tanto necesita el gobierno de la 4T para sus programas sociales) pero que hasta el momento no ha sido suficiente para que se haya presentado una denuncia por parte de la autoridad federal ante el posible daño al erario.
Ahora es cuando podremos ver si de veras hay una intención de combatir y castigar la corrupción sin desperdiciar recursos en consultas inútiles y no vinculantes respecto a si se debía llevar o no a juicio a los ex presidentes de México, aquí hay una buena razón cuando menos para llamar a cuentas a Enrique Peña Nieto, quien parece que sigue feliz de la vida viajando por el mundo sin que se le toque un cabello.
Oportunidad de hacernos ver que todo va más allá del show mediático que representa el escarnio público a ex gobernantes de todos los niveles de gobierno hay por montón, pero resulta que el único interés es en este caso, aparentemente, asustar con el petate del muerto al grupo de Atlacomulco y a la alianza que hoy pone en el estrado a Alejandra del Moral como candidata al gobierno del Estado de México.
No es nuevo que se use las instancias de procuración y administración de justicia con fines más allá de sólo aplicar la ley, reputaciones se han venido abajo con denuncias infundadas, o con denuncias bien fundadas que con el paso del tiempo terminan cayéndose por la falta de interés de que se haga justicia.
No dejar de lado que Delfina Gómez tiene asuntos muy cuestionados durante su administración al frente de la Secretaría de Educación que de estar el mango de la sartén en poder del PRI, hoy la historia sería otra.
De este modo no me queda duda que conforme más se acerque el 2024, seremos testigos de puro show.
Miguel Ángel Puértolas
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