Menos gobierno y más sociedad: ¿se podrá?
Un maestro de Harvard, Henry David Thoreau, propuso en el siglo XIX la desobediencia civil, que ya habían señalado los anarquistas rusos desde finales del siglo XVIII: que debería haber más sociedad y menos gobierno. Esta dicotomía entre la intervención directa del pueblo y el poder de la votación ha estado latente durante dos siglos.
Sin embargo, ahora en Nuevo León se percibe una lucha entre el poder del Congreso y el del Ejecutivo, mezclándose también el Judicial, que es el que forma el equilibrio y toma las decisiones en un estado basado en el derecho, pues se dice que el Congreso quiere participar de nombramientos que en el pasado le correspondían al Ejecutivo y ahí vuelve otra vez la dicotomía entre si los empleados de confianza deben ser de quien obtuvo el voto para ejecutar, o debe compartirse con los que obtuvieron el voto para hacer leyes.
La solución de este problema no está en la política del poder, sino en el análisis sociológico profundo del tema. Ojalá que la academia sustituya la sed del poder y se estudie antes de actuar.
Descartes: Pienso, luego existo… Sociedad y gobierno se unen solo con la confianza, no con la política del poder.
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