¿Qué pasa cuando no se cumple con las exigencias de una liga que se precia de ser la mejor organizada del mundo? ¿A quién se responsabiliza por no haber tenido el cuidado de cumplir con los estándares mínimos de calidad que la NFL exige para llevar sus juegos a otros países? ¿Quién siquiera ha asomado la cabeza para tener un adecuado manejo de crisis en una situación donde la imagen de nuestro país ha quedado ridiculizada?
Y podrán decirme lo que quieran y tacharme de mamón exagerado, pero me queda claro que, en el exterior, cuando se habla de la cancelación de un espectáculo de tal naturaleza, se generaliza en el país; se habla de México y no de los responsables directos.
¿La razón? Simple. Aparentemente y después de una inspección al Estadio Azteca, tanto los expertos de la NFL como la asociación de jugadores, tomaron la decisión de cancelar el partido, esto debido al mal estado del campo.
De acuerdo con un comunicado de la liga, se notificó que se trabajó por meses en la planeación de este encuentro y que debido a un cargado calendario de eventos deportivos y de espectáculos, además de la fuerte temporada de lluvias, se decidió no llevarlo a cabo como medida de seguridad e integridad para proteger a los propios jugadores. Esto es, que calificaron el campo del Azteca como un riesgo innecesario.
¿Se puede hacer un mayor ridículo a nivel mundial? ¿En verdad no se pudieron calendarizar mejor los eventos que se tenían programados en el Azteca para evitar una situación como la que se presentó? ¿Acaso pensaron los organizadores que la NFL trabaja como la liga de futbol casera y que iban a poder jugar en un potrero, poniendo en riesgo la integridad de sus jugadores? ¡Carajo!
Y ya no hablemos, mis tres ávidos y entusiastas lectores, de las consecuencias que vendrán a futuro y de la probable cancelación de partidos de la NFL en nuestro país. Por lo pronto, todas las actividades previas al encuentro se tuvieron que suprimir igual, además de las pérdidas económicas que ascienden a poco menos de mil millones de pesos para la CdMx.
¿Valió la pena realizar el 7 de noviembre un evento del canal Telehit, como para poner en riesgo el terreno de juego? ¿La codicia de los propietarios del inmueble, así como de los que administran dejó un ingreso equiparable a la derrama que genera la NFL? No solo estoy seguro de que no fue así, sino que, para acabarla de joder, dieron al traste con la imagen del país. Para muchas personas en el mundo entero, México es y seguirá siendo un país bananero en el que no se cumplen las reglas ni se respetan acuerdos. Así las cosas.
Twitter: @AzconaMilenio