Negocios

Trump dinamita el comercio global

Llegó el “Día de la Liberación”, el término que utilizó el presidente Trump para describir lo que iba a suceder en EU tras las medidas que anunció ayer, y el orden comercial mundial que imperó por décadas llegó a su fin. Trump impuso un arancel generalizado de 10% a todas las importaciones a su país, con tarifas aún más altas para ciertos países que considera “malos actores” comerciales, dentro de los que se encuentran China (34%) y, sorprendentemente, la Unión Europea (20%), Japón (24%) y Vietnam (46%). México, por ahora, quedó fuera de la lista. Podemos esperar que la reacción del resto del mundo sea contundente, lo que puede desencadenar una guerra comercial global y una nueva era proteccionista. 

Trump siempre ha visto los superávits comerciales como una especie de abuso. Considera que si un país exporta más a EU de lo que importa se está aprovechando y busca, con sus aranceles, reparar un supuesto daño histórico. No importan los enormes beneficios que la globalización le ha aportado a su país ni que la teoría y la práctica económica desmientan su postura sobre los desequilibrios. El comercio no es un juego de suma cero, en el que, si alguien gana, alguien tiene que perder. No contempla que con el libre flujo de bienes y servicios el pastel crece y que todos pueden ganar. 

Los aranceles impuestos antes de ayer ya habían llevado la tasa efectiva promedio de importación en EU de 2 a 8%, el nivel más alto desde la Segunda Guerra Mundial. Ahora, con esa nueva ola de aranceles, el costo de importar se disparará. Nadie gana en este escenario. 

Aunque en términos relativos México salió bien librado, no estamos inmunes a la política arancelaria de Trump. Somos el principal socio comercial de EU, con más de 40% del PIB nacional vinculado al comercio bilateral. Además, nuestro superávit comercial con EU alcanzó 170 mil millones de dólares el año pasado. Solo China tiene un superávit mayor. 

Si los aranceles generales de 10% se mantienen por un periodo prolongado de tiempo, México será el país más afectado, con una caída estimada del PIB superior a 1%, según la OCDE. Pero EU tampoco saldrá ileso: su economía puede contraerse en una proporción similar y la inflación dispararse. 

Los mercados ya dieron un veredicto inicial. Al momento de escribir esta columna, los futuros de las bolsas estadunidenses y de gran parte del mundo mostraban caídas significativas y el peso se mantenía estable (quizá por el relativo menor impacto que sufrimos). 

Aún es muy pronto para medir el impacto total de esta medida, incluidas sus repercusiones en México. Mucho dependerá de la respuesta del mundo y de la capacidad de la economía estadunidense para absorber el golpe. Si los consumidores en EU sufren con precios más altos y bajo crecimiento, es posible que Trump recapacite. Lo dudo. Mi esperanza era que el Día de la Liberación ayudara a liberar la incertidumbre. Lo que despejó es que la globalización está en peligro de extinción.


Google news logo
Síguenos en
Julio Serrano Espinosa
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.