Pero no es un concepto nuevo ni tiene mucha vigencia entre los entrenadores que lo aplican. Es un sistema muy atractivo para la tribuna, mientras se gane.
Es impactante cuando se ve por primera vez y se acompaña de triunfos pero suele desgastarse rápido y los rivales le encuentran pronto la solución a la presión que reciben en zona defensiva.
Para las nuevas generaciones el concepto de la presión alta lo vieron con Gustavo Matosas en León, fútbol ofensivo en el que los jugadores tienen como prioridad atacar.
El uruguayo acompañó de ascenso y títulos su paso por los Esmeraldas por lo que se ganó la inmortalidad en la ciudad del zapato.
Para ejecutar la presión alta se requieren dos cosas: defensas rápidos en el mano a mano y contenciones de pronta recuperación en terreno del rival para evitar exponerse a los balones largos o al toque de pelota del rival con los espacios abiertos desde la línea del mediocampo.
Santos Laguna ha desarrollado una gran ofensiva con Julio Furch, Brian Lozano y Adrián Lozano en la que ocasionalmente participa Eryc Castillo.
Pero la parte defensiva del equipo es deficiente. Durante la racha de cuatro victorias hubo equipos que avisaron de esas deficiencias como Chivas y Atlas.
Guillermo Almada utiliza sólo cuatro jugadores en su alineación con formación defensiva: Jonathan Orozco, Hugo Rodríguez, Matheus Doria y Ulises Rivas.
Los laterales Carlos Orrantia y Gerardo Arteaga eran volantes ofensivos y Fernando Gorriarán no da muestras de ser un recuperador de balones en medio campo.
Para tener mayor tendencia a ganar los partidos, el equipo albiverde necesita tomar la ventaja en el marcador para someter a desgaste físico y metal al rival.
Un asunto que mostró el partido ante Necaxa es que los clubes de la Liga Mx estudian y analizan al rival con detenimiento.
Guillermo Vázquez metió tres delanteros a su alineación y velocidad al mediocampo por el centro, eso provocó serios problemas defensivos, aunado a la debilidad en la defensa central.
A diferencia de Ecuador, el nivel de juego en México es mayor y se cuenta con al menos 12 equipos que compiten.
La vocación ofensiva es atractiva, sin embargo, se requiere defensa cuando se compite con los equipos de nivel medio alto en el fútbol mexicano.