Hace unos días, Zoé Robledo, director general del IMSS, me comentaba el grado al que el empleo asegurado en México ha crecido más que proporcionalmente que la propia economía del país. En efecto, los datos demuestran que el crecimiento de puestos de trabajo registrados ante el IMSS ha sido de 3 veces el crecimiento del producto interno bruto (PIB) para el periodo comprendido entre el inicio de esta administración y el cierre de 2023. Una proporción tan elevada como esta no se había observado en, por lo menos, lo que va del siglo.
Esto, además, no es algo que esté ocurriendo solo con el empleo asegurado. Los datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) de diciembre del año pasado, revelan un mercado laboral vigoroso y en buena salud. La tasa de desocupación reportada se ubicó en 2.6 por ciento, muy cercana al mínimo histórico de 2.4 por ciento que se alcanzó en marzo del mismo año. Al mismo tiempo, el total de personas ocupadas tuvo un alza anual de 2.1 millones (5.4 por ciento), para culminar 2023 en 41.1 millones, y la tasa de informalidad laboral cayó 1.3 puntos porcentuales con respecto a 2022, para ubicarse en 53.6 por ciento. Este crecimiento más que proporcional del empleo con relación a la economía desde 2018 tiene diversas explicaciones.
En el caso del trabajo asegurado y la disminución de la tasa de informalidad, está claro que las recientes reformas de subcontratación (outsourcing) y la mejoría en los procesos de fiscalización del propio IMSS, han contribuido al resultado. Como ejemplo del impacto de estas reformas y mecanismos, entre noviembre de 2020 y julio de 2022, 2.9 millones de personas fueron reconocidas por su patrón real.
Por otro lado, en el caso del mercado laboral en su conjunto, ha sido muy importante el incremento en la demanda agregada, derivado, entre otros elementos, de la fortaleza tanto del consumo interno como del sector exportador, así como de la creciente influencia de la inversión por procesos de relocalización (nearshoring). La economía mexicana es intensiva en mano de obra, por tanto, todo este impulso tiene un efecto más que proporcional precisamente en ese factor, de ahí que su crecimiento supere al de la economía misma.
En la medida en que estos indicadores mantengan el ritmo, será de esperarse que en los próximos meses el mercado laboral mantenga e incluso aumente el vigor con que el mercado laboral se ha comportado, lo cual es, sin duda, una buena noticia.
Alfa positivo. El día de ayer Carlos Hank González y Marcos Ramírez Miguel, de Grupo Financiero Banorte, anunciaron el lanzamiento de Bineo, primer banco 100 por ciento digital en México. A diferencia de otros servicios bancarios digitales, Bineo es el único que cuenta para sí mismo con una licencia de Institución de Banca Múltiple, con lo cual sus ahorradores están protegidos por el IPAB. Tomando en cuenta que Banorte ha sido distinguido como mejor banco digital de consumo en México, es de esperarse que Bineo ponga la pauta y satisfaga a un segmento de mercado que crecientemente ha demandado mayor digitalización en todo tipo de servicios.