El subgobernador de Banxico, Jonathan Heath, advirtió sobre un deterioro en la inflación subyacente (los precios de productos y servicios excluyendo energía y otros elementos volátiles) y rechazó que existan condiciones para continuar recortando la tasa de interés, pese a la decisión mayoritaria de la Junta de Gobierno.
Explicó que este componente inflacionario se mantiene por encima de 4.20 por ciento y mostró incrementos marginales. Además, las expectativas de inflación para la subyacente volvieron a aumentar tanto para el cierre de 2025 como para 2026. También recordó que el pronóstico para este rubro se revisó al alza nuevamente, como ya ha ocurrido en decisiones previas.
“En ausencia de señales claras de que la convergencia se alcanzará dentro del horizonte de pronóstico, nuestra guía prospectiva debe dejar de señalizar una reducción adicional en la tasa objetivo”, afirmó.
Heath advirtió que una relajación monetaria prematura llevaría a alcanzar niveles de neutralidad en un entorno de inflación aún elevada, lo que tendría efectos regresivos para la población.
“Mandar un mensaje de complacencia ante presiones inflacionarias persistentes podría afectar más las expectativas inflacionarias que la propia lasitud en la tasa real ex ante”, señaló.
Finalmente, subrayó que es necesario reconocer explícitamente que el objetivo no es solo mantener la inflación dentro del rango de variabilidad, sino lograr de manera sostenida la meta puntual de 3 por ciento.
¿Qué dicen las minutas del Banxico?
Por su parte, la Junta de Gobierno consideró apropiado continuar con el ciclo de disminuciones de la tasa de referencia. Lo anterior derivó de la valoración del panorama inflacionario actual, el comportamiento del tipo de cambio, la debilidad reciente de la actividad económica y los posibles impactos de cambios en las políticas comerciales a nivel global.
Banxico indicó que también tomó en cuenta el grado de restricción monetaria vigente. Con la presencia de todos sus integrantes, la Junta decidió por mayoría reducir en 25 puntos base el objetivo para la tasa de interés interbancaria a un día, para ubicarla en 7.25 por ciento .
Hacia adelante, la Junta valorará nuevos recortes a la tasa de referencia, tomando en cuenta los efectos de todos los determinantes de la inflación. Las acciones que adopte deberán asegurar que la tasa sea congruente con la trayectoria requerida para lograr una convergencia ordenada y sostenida de la inflación a la meta de 3 por ciento.
Tipo de cambio y mercados financieros
La mayoría de los integrantes destacó que, desde la última decisión, los mercados financieros mostraron condiciones estables, reflejadas en movimientos acotados del tipo de cambio. No obstante, un miembro señaló que en días recientes el peso registró una ligera depreciación, en línea con lo observado en otras monedas emergentes.
Algunos coincidieron en que la posición comercial favorable de México frente a Estados Unidos, gracias al acceso preferencial derivado del T-MEC, controbuyen al buen comportamiento de la moneda nacional. Otro integrante puntualizó que la apreciación del peso a lo largo del año también responde al debilitamiento generalizado del dólar estadounidense.
Se destacó que los diferenciales de compra y venta del dólar se mantienen por debajo de su promedio histórico y que la volatilidad implícita en opciones de tipo de cambio continúa en niveles bajos, comparables con los registrados a inicios de 2024. Además, esta volatilidad se ubica dentro de los percentiles más bajos de su distribución histórica.
Respecto a la curva de rendimientos, la mayoría señaló que, desde la última decisión de política monetaria, las tasas de interés de los valores gubernamentales de corto y mediano plazos registraron disminuciones, mientras que las de largo plazo mostraron aumentos.
Uno de los integrantes observó que, aunque hubo un comportamiento diferenciado entre tramos, la curva mostró disminuciones en todos sus plazos respecto a mediados del año.
Asimismo, advirtió que en México las tasas de largo plazo han caído mientras que en Estados Unidos se han mantenido estables, lo que podría sugerir una compresión en las primas por riesgo.
Otro integrante añadió que la curva de rendimientos de tasas reales también mostró retrocesos en la mayoría de los plazos, y que el mercado accionario alcanzó un nuevo máximo histórico, impulsado en parte por el buen desempeño del sector de materiales. Sin embargo, alertó que la renegociación del T-MEC podría convertirse en un factor de riesgo para los mercados financieros nacionales.
En cuanto al mercado de crédito, un miembro de la Junta señaló que persiste una elevada expansión crediticia y un notable crecimiento de la base monetaria.
MRA