Margarita Arias Osorio, directora general de Operación y Obras de la secretaría del Agua, señaló que la seguridad hídrica del Estado de México es fundamental para tres pilares: el bienestar de la población, la salud de los ecosistemas y el desarrollo económico.
Por ello, anunció formalmente el arranque de la Estrategia Hídrica con el Sector Privado que, de la mano con el gobierno federal, llevará no solo a una política unilateral, sino a una alianza genuina basada en la corresponsabilidad, la innovación y la rentabilidad.

En próximos días se reunirán con empresarios
Durante la capacitación a empresas sobre la Ley de Descargas de Agua organizada por la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) en la entidad, recalcó que esta estrategia no solo será impuesta, será codiseñada con la industria y los demás actores.
En las próximas semanas -precisó- invitarán a los empresarios a integrarse a mesas de trabajo temáticas y definirán juntos las reglas de las iniciativas conjuntas, seleccionarán los primeros proyectos piloto para implementación, financiamiento y construirán de manera consensuada la modernización normativa que necesita el Estado de México para ser ágil, competitivo y sostenible.
Las empresas que se sumen desde el inicio -expresó- serán pioneras, obtendrán beneficios directos y acompañamiento prioritario del gobierno, acceso preferente, asesoría y acompañamiento para buscar financiamiento, así como visibilidad como empresas líderes en sostenibilidad e incluso influencia directa en las políticas quedará en forma al futuro hídrico del Estado.
“Su voz será e la escuchada, su experiencia será parte del diseño institucional”. señaló.
Juntos -añadió- prepararán el camino hacia el próximo Consejo Hídrico Estatal, donde el sector privado tendrá un asiento y una voz permanente de la mano con la sociedad civil.
"Queremos iniciar esta alianza con un referente de acción simple, concreta y rentable, tal como aprovechar el agua pluvial en las instalaciones industriales, ya que sus techos son activos hídricos subutilizados que pueden convertirse en una fuente directa de ahorro y resiliencia”. indicó.
Por cada mil metros cuadrados de un techo una empresa en el Estado de México -explicó- se puede captar alrededor de 700 metros cúbicos al año, lo cual se traduce en ahorros estimados de entre 35 mil y 60 mil pesos anuales, dependiendo de la tarifa o costos de extracción.
Agua de lluvia ideal para usos industriales y más
Más allá del ahorro económico -añadió- el agua de lluvia es ideal para múltiples usos industriales, sanitarios, limpieza, riesgo de áreas verdes, torres de enfriamiento e incluso ciertos procesos no potables, lo que significa que una parte importante de la demanda diaria puede cubrirse con el agua que simplemente se va al drenaje y provoca inundaciones.
Sostuvo que hay ejemplos en el mundo que confirman el potencial, empresas globales como Toyota o Heineken han reducido entre 30 y 80 por ciento su consumo de agua en red gracias a sistemas de captación pluvial.
Componentes
Para que esto sea posible -dijo- el gobierno debe cambiar su papel para convertirse en socio estratégico y su oferta de valor para la industria incluye cuatro componentes:
Primero, acompañamiento para acceso a financiamiento, es decir, gestionar fondos nacionales e internacionales, bancas de desarrollo y esquemas de coinversión para que proyectos de alto impacto no estén limitados por el capital inicial.
Segundo, asesoría técnica especializada con personal de la Secretaría de Aguad y de Universidades, y conforme aumente la demanda se abrirá un padrón de peritos del agua certificados, emanados de las mismas localidades, donde integrarán a los diferentes sectores sociales para garantizar que sus proyectos se diseñen e implementen con calidad y rapidez.
Tercero, simplificación y modernización normativa para dar jurídica, agilizar procesos y construir reglas claras para que funcione para todos.
Cuarto, reconocimiento público con la creación el Distintivo Industria Hídrica Responsable del Estado de México para las empresas que adopten prácticas sostenibles del agua.
kr