En la era digital, pareciera que la solución a los problemas de pareja están al alcance de un clic. Así, contenidos como “secretos del sexo después del matrimonio”, “tips para discutir sin pelear” o “claves para saber si la relación ya no funciona” circulan como recursos para obtener esa relación sana que tanto anhelamos.
Y si bien la mayoría no son incorrectos, deben tomarse con cuidado y no asumirlo como un instructivo. Es decir, que está escrito sobre piedra y aplica igual para todos los casos.
“Hay cosas que van a aplicar para una historia de pareja y otras que no. (...) Entonces hay que ser cuidadosos con esos mandatos de ‘si tu pareja hace esto’ o ‘si no tienen esto, entonces no van a funcionar’”, remarcó el psicólogo, Rogelio Custodio.
Tras conversar con MILENIO, el especialista en parejas y sexología señaló que la respuesta a la gran pregunta “¿Cómo saber si una relación está funcionando?” es más compleja que lo que cualquier post de Instagram, página web o video en TikTok pudiera explicar.
Por ejemplo, quizá un blog señala que una de las claves para la “relación exitosa” es tener proyectos a futuro o ser un apoyo emocional para la otra parte. Pero … ¿Y si la pareja se rige por la idea de “vivir el aquí y el ahora” o es partidaria de respetar la individualidad? ¿Entonces no es una relación sana ni feliz? “No necesariamente”, respondió Custodio.
“Una de las invitaciones que hago es que estos libros o el contenido en redes se vean como referencias y que uno analice su propia historia, sus propias narrativas y vea si le hace sentido o no. (...) Revisar si es algo que uno quiere y si uno lo quiere, pues adelante, pero si no te hace sentido o no lo quieres en ese momento, pues no pasa nada”.

Por ello, al comenzar una relación las partes deben tener claro qué quieren, para qué están ahí y cuáles son sus expectativas. Una vez definidos, ya se podrían establecer parámetros— o indicadores, como lo refirió el psicoterapeuta— con los que se puedan identificar si ese vínculo es o no exitoso.
“Estamos muy acostumbrados a entrar en relaciones sin tener claro lo que uno quiere. Entonces, cuando uno sabe lo que quiere desde el inicio, puede tener relaciones más equilibradas y armónicas”.
¿Qué define a una relación exitosa?
Más allá de cuántos planes a futuro tienen, la posibilidad de tener hijos, el tiempo compartido o los hábitos, Rogelio destacó tres puntos con los que las parejas pueden determinar si su relación está funcionando.
Claro, siempre y cuando ambas partes hayan objetivos en la relación y planteado acuerdos.
1. Cómo resuelven sus diferencias
Aunque afirmen ser la media naranja de la otra parte, en una pareja conviven dos personas con hábitos, costumbres, gustos y comportamientos distintos— a veces, extremadamente diferentes—. Por ende es normal que lleguen a discutir, pero será su habilidad para llegar a acuerdos uno de los factores que define el bienestar de la relación.
“No es que las parejas tengan problemas o dificultades, sino que las que son exitosas son las que pueden hablar de esos temas, llegar a acuerdos, negociar y mediar. (...) La capacidad para gestionar conflictos y soluciones”

2. Adaptarse y re-adaptarse
Cual juego de sube y baja, las relaciones atraviesan experiencias memorables, crisis, cambios en el estilo de vida, tristezas, buenas noticias, celebraciones, entre muchas más vivencias. Pero el cómo las superan— especialmente las más desafiantes o difíciles— también define a una relación benéfica, feliz y sana.
“Por ejemplo una pareja que tiene hijos; que decide cambiarse de ciudad, o en donde una de las partes cambia de trabajo, va a conllevar cambios que van a impactar directa o indirectamente a la relación: verse menos, cambiar el foco de atención o tener menos dinero. Entonces las parejas que logran adaptarse, van a hacer que funcionen más tiempo o mejor en ese proceso de adaptación”.
3. La regla del 5-1
Referida por el Instituto Gottman como “la proporción mágica”, refiere a que por cada interacción negativa durante un conflicto, un matrimonio feliz tendrá cinco o más interacciones positivas.
De acuerdo con el centro de investigación especializado en relaciones de parejas, las interacciones negativas incluyen ser emocionalmente despectivos o críticos, tener una actitud defensiva o lenguaje corporal hostil (poner los ojos en blanco, levantar las cejas a modo de juicio, bostezos, etcétera).
En tanto, dentro del parámetro positivo entran actitudes que demuestren interés, con preguntas abiertas o señales sutiles como asentar o mirar a los ojos; expresar afecto, tomando la mano de la pareja o abrazar después de la discusión; demostrar que se importan; encontrar oportunidades para llegar a acuerdos; empatizar y disculparse; aceptar la perspectiva de la pareja o hacer chistes.
Por supuesto, agregó Rogelio, cuando esta condición se revierte— es decir, presentan una buena interacción por cada cinco malas—, la relación puede ponerse en jaque e incluso dejar de funcionar. Ejemplo de estos casos son aquellas parejas que invierten la mayoría de tiempo peleando y tienen pocos recuerdos gratificantes.
“Eso desbarata la relación”.

¿Cómo saber si mi relación ya no da para más?
El Instituto Gottman refiere que la empatía “es una de las formas más profundas de conexión humana”, pues es una manera de demostrar comprensión y simpatía con los sentimientos de la otra parte, especialmente en discusiones o conversaciones incómodas. Sin embargo, la simpatía también tiene límites.
“Las personas que creen que el amor todo lo puede, les va a costar decir: ‘Hasta aquí’. Entonces (ese pensamiento) va a hacer que incluso toleren o dejen pasar circunstancias fuertes, como la violencia, por ejemplo”.
Ante ello, el psicólogo planteó dos puntos esenciales— más no los únicos— que pudieran indicar poca o nula mejoría en la relación. Esto toda vez que la pareja ya no esté en disposición de negociar y llegar a nuevos acuerdos.
- Si les cuesta comunicarse no violentamente. Es decir, que no haya apertura a escuchar o plantear nuevas preguntas.
- ¿Qué tanto se están cumpliendo los no negociables o los temas importantes en la relación de pareja? Dígase tener o no hijos, empezar a vivir juntos, cambiarse de casa, respetar horarios, etcétera.
ASG