La tragedia se hizo presente de nuevo. La fuerza del río San Marcos y la necesidad de cruzar para pedir ayuda ante la falta de caminos en la Sierra Norte se mezclaron otra vez y derivaron en la desaparición de un menor de edad que fue arrastrado por la corriente.
Los hechos ocurrieron en la localidad de Tlapehuala, en el municipio de Tlacuilotepec, que es uno de los tres municipios que permanecen sin vías de comunicación terrestres junto a Pahuatlán y Tlaxco, ya que fueron destruidos por los deslaves y la fuerza del río.

De acuerdo con familiares de la víctima, Rey Hernández Carballo, de 17 años de edad, y su hermano Juan Manuel, de 19 años, salieron de su casa el domingo pasado para cruzar el río y obtener algunos víveres en Xicotepec.
Juan Manuel logró llegar al otro extremo, pero fue insuficiente porque detrás sólo alcanzó a observar cómo Rey era arrastrado por las aguas del afluente, sin que volviera a mostrar señales de vida.
Habitantes de Tlapehuala se unieron a las peticiones de la familia Hernández Carballo y pidieron la intervención de las Fuerzas Armadas de México para las labores de búsqueda. En respuesta, personal del Ejército Mexicano y de la Secretaría de Marina arribaron a la zona con binomios caninos, sin que el menor haya sido localizado al momento.
Sin embargo, las autoridades no descartan la posibilidad de que Rey sea la persona sin vida que fue localizada el pasado lunes en la ribera del río San Marcos, a la altura del municipio de Jalpan.
Rey sería la segunda víctima mortal del río San Marcos en menos de una semana, pues el pasado lunes se reportó que Fernando Meléndez Ríos, de 52 años, también fue arrastrado por la corriente. Su cuerpo apareció un día después sobre el cauce, pero varios kilómetros abajo, en Xicotepec.
CHM