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‘Polvo’: no es lo que imaginan

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Hoy ya pueden ver la cinta de José María Yázpik: Polvo en la pantalla grande de México y quiero pedirles un favor: olviden todo lo que piensan que esta película puede ser y déjense llevar. Sé que no es cualquier cosa estos días, y como lo platicábamos con Chema, tal vez por el tráiler que ha estado promoviendo este largometraje crean que es una historia de narcos. Pero no. Es una historia sobre encontrarnos a nosotros mismos y de revisitar nuestro pasado También es una historia muy sencilla que está perfectamente contada para lograr su objetivo: recordarnos que para ir hacia donde sea que vayamos, tenemos que recordar de dónde venimos.

Es cierto, al principio de la cinta comienzan a caer paquetes de cocaína del cielo. Parece difícil imaginar que existe algún lugar donde la gente no sabría que algo está profundamente mal con esa situación, pero como platicamos con el cineasta, aun existe un México que, aunque se ve afectado por todo lo que pasa a su alrededor, vive como siempre ha vivido, en un momento en el tiempo donde las cosas no siempre son, necesariamente, consecuencias del peor de los escenarios.

El trabajo de Chema Yázpik lo hemos gozado y seguido por muchos años, tanto en el escenario como en la pantalla chica, como en la grande. Producciones nacionales e internacionales. Él es, sin duda, una de nuestras grandes historias de éxito. Sin embargo, esta es la primera vez que vemos su trabajo como director, y debo decir que es delicioso.

Chema no nos está distrayendo con recursos impactantes o trucos en la narrativa. Tiene una historia que contar de principio a fin y un lenguaje muy particular con el cual ésta se cuenta. Eso va desde la caracterización hasta el acento de cada uno de los personajes, muchos de ellos grandes amigos del director y protagonista, pero también de los mejores actores de nuestro país como Joaquín Cosío, Angélica Aragón y Jesús Ochoa, quienes siempre cumplen, y Mariana Treviño, que nos deleita con un personaje tan distinto a lo que jamás le habíamos visto, demostrando que tenemos una actriz de gran rango y talla mundial entre nosotros. Así que no, quizás sí es un error que cometen los narcotraficantes lo que detona la acción en esta cinta. El Chato, quien es el personaje de Chema y protagonista de la cinta, tiene que arreglar la situación quiera o no. Y si no lo hace, pues todo lo que alguna vez amó corre peligro.

En el camino hay una historia de amor y despecho, humor negro del bueno, y sí, un verdadero conflicto que resolver. Pero lo que más resuena es la humanidad de cada uno de estos personajes, que de pronto descubren que la aparente calma de una vida sencilla nunca está garantizada. Hace 10 años a Chema y a su hermano se les ocurrió esta historia mientras visitaban en Baja California, precisamente el lugar donde crecieron. Una década después es una cinta de la que se pueden sentir más que orgullosos y que a nosotros nos puede sorprender. Vale la pena que nos demos esa oportunidad, ver un trocito de nuestra realidad con otros ojos. Quizás eso nos ayude la próxima vez que estemos angustiados por el panorama grande. Y bueno, si amamos al cine es precisamente porque nos puede dar sorpresas como esta.

susana.moscatel@milenio.com

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Susana Moscatel
  • Susana Moscatel
  • 25 años de periodista y conductora de entretenimiento. Ha publicado tres libros, traducido 18 obras y transmitido el Oscar y el Tony, entre muchos otros. Escribe de lunes a viernes su columna Estado fallido.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
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