Al filo de la madrugada del sábado, agentes de la policía antinarcóticos de Paraguay, comandados por el fiscal Giovanni Grisetti, arribaron al barrio de Surubi’i de la ciudad de Mario Roque Alfonso.
Ahí se encuentra la lujosa residencia donde se hallaba escondido el mexicano Hernán Bermúdez Requena, ex secretario de Seguridad del estado de Tabasco y supuesto líder de la organización criminal La Barredora.
De acuerdo con las autoridades paraguayas, a partir de mayo de este año se detectó la presencia de este sujeto en su país.
A pesar de que, desde febrero, existía orden de aprehensión en contra suya, hay testigos que afirman haberlo visto, hacia finales de abril, en un inmueble ubicado en las playas tabasqueñas. Luego de esa fecha habría viajado a Paraguay.
Al parecer, Bermúdez Requena vivía solo y fue sorprendido en su recámara vestido con ropa para dormir. Los videos de la detención lo muestran bocabajo, rodeado por personal que le apunta con armas largas.
Posteriormente fue llevado a la planta baja donde se le mostró, entre otros documentos, una orden de detención expedida por el juez paraguayo Osmar Legal, antecedida por la solicitud de extradición del gobierno mexicano.
El domicilio ocupado por Bermúdez Requena se halla cerca de Puerto Fénix, un embarcadero privado que pudo haber servido para escapar, en caso de que la operación hubiese fracasado.
En el transcurso de la mañana siguiente, el abogado del detenido informó que su representante se negó a aceptar el proceso de extradición voluntaria. Será por tanto necesario que el juez responsable de la causa, Osmar Legal, dé inicio a un complicado trámite que podría demorar bastante el momento en que el ex funcionario tabasqueño vaya a ser devuelto a México.
Juega su edad a favor de la dilación. Hernán Bermúdez Requena tiene 72 años y, según las leyes paraguayas, esta condición le entregará protecciones excepcionales, mismas que, con toda seguridad, el detenido va a aprovechar.
Zoom: No será pronto que Bermúdez Requena pueda ser interrogado por la Fiscalía General de la República mexicana a propósito de sus cómplices, dentro y fuera del gobierno. Mejor sentarse a esperar, porque el trámite de extradición va a ser largo.