Existe un curioso gabinete de análisis político llamado SPIN, Taller de Comunicación Política.
Producen, entre otras cosas, infografías que analizan el principal mecanismo de comunicación del gobierno federal: las conferencias mañaneras.
Por las conferencias mañaneras hay alucinados que califican al presidente de “genio de la comunicación”, de modo que resultan muy útiles las infografías de SPIN para ver algunos rasgos de estas conferencias.
El último análisis, al 29 de mayo, arroja que, en 546 días de gobierno, ha aparecido en 378 mañaneras que han durado en promedio 101 minutos. Entre el 3 de diciembre de 2018 y el 15 de mayo de 2020, el presidente ha hecho 26,161 “afirmaciones no verdaderas”.
Así las califica SPIN. Yo les llamaría mentiras. En promedio 71 por conferencia. En promedio una cada minuto con veinticinco segundos. Debe ser agotador mentir tanto.
Ayer el presidente sacó a colación a su hijo Jesús. A los políticos les encanta sacar a colación a su familia.
Resulta que, si hemos de creerle, el profesor de biología del menor dijo que el Tren Maya no debe hacerse por el daño que causará. Jesús pidió explicaciones a su padre.
Este respondió -y aquí viene la mentira gorda- que “no se va a afectar en nada el monte alto”, explicó que no se va a afectar la selva porque ya no existe.
Días antes, para acusar a los ambientalistas de ser extorsionadores (otra mentira) mencionó que el Tren Maya irá por donde ya existe una vía y, por tanto, no habrá afectaciones.
No dijo que tan sólo el 38% del trayecto va sobre una vía existente y el 62% tendrá que desmontarse el terreno para que entre la maquinaria y que mucho de este terreno es selva.
No es solo el tren. El mecanismo para su financiamiento se llama FIBRA que significa financiamiento de infraestructura y bienes raíces.
Tras del tren viene un proyecto demencial de un nuevo Cancún en Bacalar y desmontar la selva más grande que nos queda, la que arropa a Calakmul y Xpujil. En esta selva se planea construir varias ciudades, es decir, destruirla.
Siempre hay que salir al paso de las mentiras, así sea el presidente quien las diga.
(twitter.com/fvaldesp)