Quiero recuperar la tradición de “comentar la novela”. Estamos de acuerdo en que el final de “Golpe de suerte” fue un exitazo. Los números que han estado circulando por todos lados son altísimos.
Pero eso sólo le debe de importar al productor, a TelevisaUnivision, a los que saben y deben interpretar los “ratings”. ¿Qué pasa con lo que muchas personas vimos el domingo por la noche?
¿A usted le gustó? ¿No le gustó? ¿Quedó satisfecho? ¿Esperaba más?
No se asuste. No le voy a “spoilear” a los mercados internacionales pero aún así creo que sí podemos intercambiar ideas. Le suplico me responda a través de las redes sociales.
De entrada, aquello no fue el final de una telenovela. Fue como ir al cine a ver las películas nominadas al Oscar. ¡Qué barbaridad! ¡Dos horas y media de desenlace!
Yo cené, me hizo la digestión, me volvió a dar hambre y aquello no se acababa. ¡Fueron el equivalente a dos capítulos y medio! ¡Y los aguantamos!
Eso es la prueba máxima de que sí nos enamoramos de “Golpe de suerte” aunque, no sé usted, yo hubiera agradecido otra semana más de transmisión para ir asimilando toda esa información poco a poco.
¡Porque, ah, cómo pasaron cosas! ¿Qué castigo de qué villano le pareció más tremendo? Yo todavía no puedo con el recuerdo de Eva (Marjorie de Suosa) dándose de golpes “ahí donde le platiqué” en aquel país tan lejano.
Jamás había visto algo así. ¡Con todo y sangre! ¡Qué fuerte!
Pero para sangre, esa secuencia de Dante (Sergio Sendel) como de caricatura de “El Correcaminos” en el acantilado.
¿Pero sabe qué fue lo más “bonito”? La fotografía. El atardecer, allá, todo divino y el “pobre” hombre, acá, acabando como acabó. ¡Qué cosa tan más tremenda!
Oiga, ¿y cómo vio lo de mi Facundo (Horacio Pancheri)? A mí sí me dio como “risita” porque con todo y todo, jamás dejó de ser un personaje entrañable. Si yo fuera productor, le hacía su “spin-off”.
Y aunque me hubiera gustado que Crispín (José Elías Moreno) y César (Ricardo Silva) hubieran desarrollado otra clase de historia, aquello cerró de una forma muy honesta, yo diría que adecuada.
¿Qué final de qué grupo de personajes amó más? No sé por qué pero a mí me encantaron los jóvenes.
Quisiera conservar varias capturas de pantalla porque estoy convencido de que así como hoy veneramos a las actrices que hicieron aquellos legendarios títulos juveniles como “Muchachitas” y “Amigas y rivales”, dentro de algunos años esas “niñas” y esos “niños” eran las superestrellas del futuro. De mí se acuerda.
A propósito de recuerdos, el viernes le escribí aquí mismo que esta producción de Nicandro Díaz era tan compleja que no había manera de adivinar el desenlace.
Y en efecto, cada pareja cerró como tenía que cerrar, sin que necesariamente fuera predecible, los niños más chiquitos fueron los que se robaron los últimos minutos de “la novela” y el musical, ¡bueno!, ¿así o más glorioso?
Para nadie es un secreto: amo con toda mi alma a Margarita la Diosa de la Cumbia y el discurso que se aventó, que se notó que nadie se lo escribió, que le salió del alma como en cualquier presentación, estuvo fabuloso.
Hasta me hizo pensar en muchas parejas que conozco. ¡Bravo por ella, por Santa Fe Klan y esa mega-rola “Con un golpe de suerte” que, por supuesto, la tengo en mi mejor “playlist”!
Por último, ¿qué notó del final de estos maravillosos libretos de Kary Fájer y un selecto grupo de adaptadores? Que el tema del premio dejó de ser lo más importante.
El desenlace de “Golpe de suerte” fue tan maravilloso como fue porque fue un homenaje al amor, a la familia, a los grandes, únicos y verdaderos valores del pueblo de México.
¡Gracias! De veras. ¡Muchísimas gracias por ofrecernos un final así, encantador!
Pero, sobre todo, gracias por ayudarnos durante tantas semanas a olvidar nuestras penas y a pasar tantos tan buenos momentos de televisión, de televisión en familia. Eso no se paga con nada. ¡Gracias! ¡Felicidades!