“Así en el futbol como en la vida: estamos todos locos, y somos un montón”
Marcelo Bielsa
Como película de terror es la que viven los dos equipos punteros del torneo Guardianes 2020: León y Cruz Azul protagonizan dos de las tres historias más terroríficas de la Liga Mx en cuanto a las problemáticas que viven sus respectivas directivas.
El Club León uno de los mejores locales del torneo actual, donde se ha visto imbatible y se ha quedado de manera momentánea sin la disponibilidad de poder hacer uso de sus instalaciones gracias al litigio que se vive con Roberto Zermeño, el cual ha tomado posesión física del inmueble.
Mucho se habla de que los esmeraldas podrían estar buscando una sede alterna si la problemática no se resuelve a la brevedad y estarían pensando como una posible opción en el estadio Sergio León Chávez de Irapuato, el cual no cumple reglamentariamente con las condiciones para ser avalado por la Federación Mexicana de Futbol para albergar un partido de Primera División.
La segunda opción para La Fiera es el Estadio de Pachuca que pertenece al mismo Grupo Pachuca, sin embargo, esta no es una de las sedes alternativas más cercanas a la ciudad y que por reglamento quizá tampoco pudiera ser opción.
La última alternativa y no descabellada es que el partido entre León y América, a celebrarse la próxima jornada pudiera efectuarse en el estadio Azteca y con ello ganar tiempo para negociar el regreso de La Fiera a su guarida.
Y qué decir de La Máquina de Cruz Azul y sus problemas con una directiva fugitiva y sin rastro de una dirección a nivel presidencial para los jugadores, que ante el escenario poco alentador que se avecina para los de La Noria prefieren tomar sus maletas y salir huyendo en busca de nuevos horizontes, y para muestra un “Igor” o dicho de otra manera el caso de Lichnovsky, que tomó sus pertenencias y salió corriendo en busca de la oportunidad de petrodólares que se le presentó.
Vaya situación la que viven dos equipos de tradición y de gran abolengo en nuestro futbol y que a muchos nos hace pensar en demasiadas coincidencias y convertirse en los equipos favoritos para protagonizar una nueva final como la del 97, en condiciones suigéneris y con muchas vertientes muy parecidas.
La primera sin una sede o mejor dicho un estadio de su absoluta propiedad; la segunda con problemas extracancha y de carácter legal que a más de uno puede llegar a desestabilizar, y por último con una base de futbolistas que si sumamos los dos últimos años futbolísticos han hecho más puntos y goles que ningún otro equipo.
La Máquina y La Fiera tendrán que luchar contra todo lo que se avecina para este cierre de torneo, pero lo que resulta aún más importante es que puedan concretar y coronar la gran racha de partidos y actuaciones dentro de la Liguilla, la cual luce tonos muy peculiares al jugarse por primera vez en un nuevo esquema de competencia, quizá hasta con la presencia parcial de aficionados en algunas sedes y con la presencia de un VAR con criterios muy disparejos, donde la presión de algunos técnicos y jugadores será fundamental para inclinar la balanza a su favor.
Esmeraldas y cementeros saben perfectamente que esta puede ser una oportunidad perfecta para repetir lo que fue una final cardíaca y que es recordada hasta nuestros días. Así que veremos si esta Liguilla se pinta a su favor.
Hasta la próxima…
Twitter: @AlbertoRomeroMP