La actividad comercial de Monterrey reporta una caída en las ventas de un 70 por ciento, ante la baja afluencia de personas en las plazas comerciales, la cual ha sido entre un 52 hasta un 75 por ciento desde que inició el periodo de la contingencia de salud por el coronavirus.
Gabriel Chapa, presidente de la Cámara Nacional de Comercio de Monterrey (Canaco), comentó que realizaron un sondeo para conocer el estado que enfrentan los establecimientos ante esta emergencia de salud.
Indicó que más de la mitad de los comercios han cerrado por iniciativa propia y el resto continúa laborando, pero con menos personal.
Mencionó que establecimientos como tiendas departamentales, ropa, calzado, accesorios, entre otros del primer cuadro de la ciudad, también reportan una baja en ventas que fluctúa en 53 y un 75 por ciento.
Mientras que la industria hotelera registra más del 50 por ciento de disminución en la ocupación de habitaciones y ni que decir de los restaurantes que prácticamente han cerrado.
La excepción son tiendas de autoservicio y de alimentos que no han dejado de recibir flujo de clientes, tomando las medidas sanitarias recomendadas por la Secretaría de Salud.
Consideró difícil de estimar la afectación en el empleo que pueden perder ante la contingencia sanitaria, dado que en este momento están recortando jornadas laborales y escalonando la asistencia de sus empleados.
Urge un plan
Canaco reprobó la actitud del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) al declarar que no apoyará a las empresas ante esta contingencia, esto sin considerar que históricamente el sector empresarial ha sido generador de empleos, paga impuesto y de riqueza, además de ser el motor de la economía del país.
Gabriel Chapa, dirigente de la cámara, también condenó la cancelación de la inversión de la empresa Constellation Brands, en Mexicali, hecho que significa un pésimo mensaje que se le envía a la inversión nacional y extranjera.
En entrevista, el líder del comercio de Monterrey llamó al gobierno a reconsiderar su posición, ya que se requiere urgentemente un plan de apoyo para las empresas a fin de poder enfrentar esta contingencia, “de no existir este apoyo estaremos ante el riesgo de una profundización de la crisis económica aunado a la crisis de salud”, añadió.
Refirió que la semana pasada los organismos empresariales del estado y del país le hicieron llegar un documento con propuestas de un plan de apoyo para todas las empresas que presenten problemas en su operación ante la emergencia de salud que se enfrenta.
A su vez, Caintra, reiteró las propuestas que hace una semana enviaron al Ejecutivo Federal.
El plan contiene ocho puntos y que tiene que ver con la suspensión temporal de los pagos provisionales del ISR y las aportaciones al IMSS e Infonavit.
Además de aumentar la disponibilidad y acceso a créditos otorgados por Nafin y Bancomext y prorrogar la presentación de la declaración anual de impuestos de las personas físicas y morales al menos a septiembre de 2020.
Caintra agregó que la propuesta incluye también eliminar el límite del 30 por ciento de la utilidad neta ajustada por deuda a la deductibilidad de impuestos durante 2020 y 2021.
“En Caintra confiamos en la evaluación detallada por parte del nivel federal de estas peticiones del sector productivo de Nuevo León, del cual dependen 1.6 millones de trabajadores formales y sus familias”.