En 21 años, los reportes de operaciones inusuales que reportó el fisco ante la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) se dispararon en un 945 por ciento, al pasar de 28 mil 746 en 2004 a 271 mil 823 en septiembre de este 2025, las cuales podrían estar vinculadas en el delito de lavado de dinero.
Este crecimiento se reporta en el informe de actividades de la Unidad de Inteligencia Financiera, una operación inusual, son conductas o comportamientos de clientes o usuarios que no concuerden con los antecedentes o actividades conocidas o declaras a las instituciones financieras. En el reporte histórico de los últimos 21 años, se puede ver que el mayor repunte se registró en 2019, cuando se registraron 590 mil 680 reportes.
Entre el 2004 y el 2019, esta cifra representó un aumento de más del 2000% por ciento; un año después en el inicio de la pandemia en el año 2020 se redujo y para el 2021cayó a 230 mil 438.
Estas alertas se generan cuando las instituciones financieras detectan comportamientos fuera del perfil habitual de las personas físicas o morales que operan en el sistema financiero o en actividades consideradas vulnerables por la Ley Antilavado.
De acuerdo con Angélica María Ruiz López, presidenta de la Comisión Nacional de Prevención de Lavado de Dinero y Anticorrupción, el incremento de reportes en estos años está relacionado con el fortalecimiento de los sistemas de supervisión y con los cambios normativos que, a partir de 2018, establecieron criterios más estrictos para las instituciones financieras; a lo que se suma una mayor capacitación del personal encargado de la prevención del lavado de dinero.
“Depende de la institución financiera, depende de las mitigantes que tengan establecidas en su protocolo, justamente para minimizar el riesgo de lavado de dinero. Actúan y pueden actuar de diferentes maneras dependiendo de la institución financiera y dependiendo de que tan inusual es la operación con respecto al perfil del cliente”, detalló.
Otro factor que influyó, aseguró que fue el cambio en la titularidad de la UIF, con la llegada de Santiago Nieto Castillo, dijo se reforzó la colaboración con instituciones financieras y organismos internacionales. Estas acciones derivaron en un aumento significativo de reportes a partir de 2019.
“Sí, justamente vimos que en 2019 destaca muchísimo el pico de reportes de actividades, aquí podemos pensar que en ese momento ya se llegó a una madurez del sistema de cumplimiento, ya teníamos varios años con la ley antilavado, hubo mucho más sujetos obligados activos inscritos y puede ser que en ese año haya habido un refuerzo de las auditorías y supervisión por parte de la Comisión Nacional Bancaria de Valores”, detalló.
También se dispara crecimiento de autorizaciones de operaciones irregulares
En el caso de las operaciones preocupantes, que reflejan posibles conductas irregulares del personal dentro de las propias instituciones, la UIF también ha registrado un aumento sostenido. Estas operaciones surgen cuando los empleados autorizan movimientos sin justificación o alteran controles internos para facilitar transferencias o depósitos irregulares.
Ruiz López detalló que este tipo de reportes son relevantes porque permiten identificar posibles colusiones o actos de complicidad al interior de las instituciones; son alertas que se investigan con especial atención, porque pueden indicar que el lavado de dinero no sólo ocurre por fuera, sino desde dentro de las estructuras financieras.
En el histórico de 2004 a 2025, en estas operaciones se registró un aumento de un 408%, cuando inició la UIF apenas se reportaron 179 casos, este año ya suma 732.
En este mismo supuesto en 2018, las operaciones preocupantes tuvieron un repunte considerable llegando a 859 – el más alto-, lo que la funcionaria atribuyó al fortalecimiento de los sistemas de autorregulación y a la obligación de reportar cualquier irregularidad detectada por el personal de cumplimiento.
Al preguntarle en que se puede incurrir, explicó:
“Alguien que tenga acceso a los sistemas de información o de alertamiento y de repente borra una alerta de una operación inusual. Entonces, pues esto sería una operación o sería motivo de reporte, si alguien manipula los sistemas como para encubrir esta situación”.
Indicó, que el incremento de operaciones preocupantes son aquellas que están vinculadas con posibles actos de corrupción, delitos financieros o actividades ilícitas también ha estado asociado a un mayor control interno por parte de las instituciones, que han fortalecido sus áreas de cumplimiento y mejorado sus protocolos de detección.
De acuerdo con la presidenta de la Comisión, el crecimiento de ambos tipos de reportes también se vincula con el aumento general del volumen de transacciones financieras y con una mayor coordinación entre la UIF y las Unidades de Inteligencia Patrimonial y Económica (UIPE) de los estados.
Guanajuato, entre los cinco estados con más índice delictivo en lavado de dinero
Aunque los informes públicos de la UIF no detallan cifras por entidad, Guanajuato se mantiene como una de las zonas prioritarias dentro de la Estrategia Nacional de Seguridad, por su nivel de incidencia delictiva y la presencia de redes financieras que operan en el corredor industrial.
La Evaluación Nacional de Riesgos 2023, elaborada por la propia UIF, ubica a Guanajuato junto con Sinaloa, Michoacán, Jalisco, Estado de México y Ciudad de México como entidades de alto riesgo en materia de lavado de dinero. En el mapa de calor, estos estados concentran la mayor actividad financiera vinculada a organizaciones criminales y el uso de empresas fachada para justificar flujos ilícitos.
“Las zonas más calientes son Sinaloa, Michoacán, Jalisco, Guanajuato, que de momento recuerdo son las más calientes en el mapa de calor. Pero las empresas las operan muchas veces desde Ciudades de México y Guadalajara, es la segunda ciudad donde operan más empresas fachadas”, puntualizó Angélica María Ruiz López, presidenta de la Comisión Nacional de Prevención de Lavado de Dinero y Anticorrupción
El documento oficial señala que las principales rutas logísticas del Bajío, junto con la diversificación industrial y el flujo de efectivo en sectores vulnerables, colocan a Guanajuato como un punto estratégico para la detección de operaciones sospechosas.
Ruiz López, enfatizó que el trabajo de la UIF se apoya también en las Unidades de Inteligencia Patrimonial de cada estado, que funcionan como extensiones locales para identificar patrones financieros y alertas regionales.
“Cada Unidad de Inteligencia Patrimonial tiene su propia vocación, por ejemplo, en cierto estado es más el tráfico de drogas, en cierto otro es la trata de personas, en otros ellos ya tienen un poquito más el termómetro de lo que sucede en sus estados y también están aportando mucha información para que sea más efectivo el combate”, aseguró.
Finalmente, la funcionaria, indicó que la labor de la UIF forma parte de la política federal de Cero Impunidad, centrada en afectar las finanzas de los grupos criminales antes que sus estructuras armadas.