En diciembre de 2019, poco después de tomar posesión de ese país, el régimen autoimpuesto/golpista de Jeanine Áñez expulsó a la embajadora de México en Bolivia. En septiembre de 2017, México declaró persona non grata al embajador de Corea del Norte por la actividad nuclear de ese país. En junio de este año, la Secretaría de Relaciones Exteriores convocó a consultas al embajador de México en Nicaragua después del recrudecimiento de la situación política en el país centroamericano. Todas estas acciones diplomáticas tienen como fin expresar las posiciones y opiniones de los Estados frente al actuar de sus contrapartes, dentro del concierto de naciones.
En los momentos de desacuerdo entre Estados, este tipo de acciones, y su sentido implícito, es entendido inmediatamente por los demás actores internacionales. Estas llevan una escala de gravedad que puede variar entre un malentendido menor, cuya reacción tradicional sería una nota de extrañamiento, hasta una afronta a la seguridad nacional, que podría derivar en una declaración de guerra. En esta vertiente de las relaciones internacionales -los sinsabores entre Estados- el oficio diplomático busca dirimir los desacuerdos favorablemente y, con la mayor armonía posible, salvaguardar los demás aspectos de una relación bilateral.
Pese a que estas señales no están codificadas explícitamente, los Estados usan un catálogo de opciones diplomáticas que incluye las siguientes, de menor a mayor gravedad aplicables al caso de México:
- Nota de extrañamiento o protesta. Es una misiva oficial expresando una preocupación puntual.
- Convocatoria del embajador extranjero. Es cuando la Secretaría de Relaciones Exteriores expresa de manera directa su preocupación al representante extranjero.
- Llamada a consultas al embajador de México. Ocurre cuando la Secretaría de Relaciones Exteriores hace regresar a su representante desde el país receptor. Pese a su nombre, es un mensaje político que se utiliza en momentos de aspereza considerable.
- Retiro del embajador de México en el exterior. Esto constituye la reducción de la relación a nivel de encargado de negocios y es un paso serio.
- Expulsión del embajador extranjero. La declaración de un embajador como persona non grata es una expresión significativa. El caso previamente expuesto ha sido la única vez que ha sucedido a un representante de nuestro país.
- Cierre temporal de la embajada. Es cuando se retira el personal diplomático y la embajada queda a nivel de encargado de archivos.
- Ruptura de relaciones diplomáticas. Su nombre lo dice todo.
En línea con la tradición pacífica y conciliadora de nuestro país, la diplomacia mexicana procura evitar llegar a situaciones extremas. Sin embargo, hay veces en que México tiene que reaccionar a posturas o gestiones de gobiernos con los que se tiene algún desacuerdo. En ese sentido, las intenciones de México son siempre apoyar el ejercicio soberano de la democracia, el respeto a los derechos humanos y el bienestar de las personas, procurando mantener los canales de interlocución abiertos con todos los actores. Hay veces en que vale repetir contribuciones que todos conocemos. Considero que esta ocasión lo amerita: “Entre los individuos, como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz”.
Por Maximiliano Reyes Zúñiga
*Subsecretario para América Latina y el Caribe de la SRE