Este 2013 fue de luz y sombra para los Derechos Humanos en el estado. Abrimos el año con el doloroso incremento de feminicidios en la región de Tula. No obstante y contrario a lo esperado, las autoridades hidalguenses sí se pusieron a trabajar para combatir el problema de raíz, aún cuando todavía están lejos de conseguir una entidad libre de violencia para las mujeres.
De las siete mujeres asesinadas en Tula, se desprendieron la tipificación del feminicidio y la transversalización de la perspectiva de género en los códigos penal y de procedimientos penales.
Luego, el 17 de mayo, en armonización con el Día Internacional, el gobernador Olvera decretó el Día Estatal contra la homofobia y la transfobia, cuya primera conmemoración tendrá lugar en 2014.
Cuando parecía que la gestión de Olvera se caracterizaría por sentar las bases para la transversalidad de los derechos humanos, vino la muy lamentable imposición en la presidencia de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo de un neófito notario quien, ni cuando fue impuesto, ni ahora, cuenta con la menor idea de cómo se efectúa la defensoría de los Derechos Humanos. El flamante presidente no llevaba ni un mes en el cargo, cuando ya contaba con una denuncia ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos por homofobia, misma que le llevó a tener presencia en diferentes medios de comunicación en el país.
A 65 años de la Declaración Universal de Derechos Humanos por parte de la Asamblea General de las Naciones Unidas, las y los activistas hidalguenses dedicados a la promoción y aplicación de los Derechos Humanos, pretendemos visibilizar el retraso que en dicha materia tenemos en el estado. Reconocemos los aciertos, pero también los errores de las autoridades estatales en el tema.
El 10 de diciembre de 1948, con la aprobación Declaración Universal de los Derechos Humanos, se pidió a los Países Miembros que publicaran el texto de la Declaración y que fuera “distribuido, expuesto, leído y comentado en las escuelas y otros establecimientos de enseñanza, sin distinción fundada en la condición política de los países o de los territorios”. 65 años después, los Estados firmantes aun no han logrado su cumplimiento.
En Hidalgo, las Organizaciones de la Sociedad Civil defensoras de los Derechos Humanos somos conscientes que el desconocimiento y menosprecio de estos derechos son causantes de una sociedad marginada, empobrecida y discriminada.
Debemos seguir luchando por lograr establecer la aspiración más elevada del ser humano, señalada por la Declaración Universal: “El advenimiento de un mundo en que los seres humanos, liberados del temor y de la miseria, disfruten de la libertad de palabra y de la libertad de creencias”.
Si bien en Hidalgo ya contamos con una Ley de Derechos Humanos, la cual sin duda es un avance significativo, estamos conscientes que las leyes no son suficientes si van solas, si van divorciadas de la sociedad. El botón de muestra fue que en la pasada elección del Ombudsperson estatal, a pesar de que correspondía a la sociedad civil organizada sugerir las opciones para la terna ante el Congreso local, fueron los organismos gubernamentales los que propusieron al “ganador”, quien a pesar de su carencia de trayectoria y su carencia de conocimientos en materia, fue votado por la gran mayoría de las y los congresistas.
Para garantizar un marco propicio de respeto a los derechos humanos, el gobierno del estado de Hidalgo, el Congreso local, las organizaciones de la sociedad civil y todas las personas interesadas, debemos construir un marco de respeto a los derechos fundamentales. Para lograrlo necesitamos impulsar:
Justicia para Fernanda Lavalle asesinada en el mes de junio de 2010, vicepresidenta de la organización “Transgénero Hidalgo”.
Justicia para Antonio Hernández Hernández y para Arturo Lavín, asesinados el 19 de julio de 2010 en la Sierra hidalguense, miembros de “Habitat para la humanidad” A. C.
Designación de las y los integrantes del Consejo Consultivo de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Hidalgo.
Que los gobiernos estatales y municipales, así como el Poder Judicial y el Poder legislativo, sean transparentes y rindan cuentas.
Que los partidos políticos respeten la paridad de género sobre resultados de elección y no sólo sobre candidaturas.
Por el derecho de las mujeres: Que se apruebe la interrupción legal del embarazo en Hidalgo.
Por la NO Discriminación, demandamos la creación de un organismo autónomo para prevenir y erradicar la discriminación en Hidalgo, como ya existe en otras entidades de México.
Por el respeto a la orientación sexo-genérica, pedimos una ley que permita el matrimonio entre personas del mismo sexo, así como una ley que promueva el derecho de identidad de género y al cambio de nombre y sexo.
El cumplimiento y respeto a la Declaración Universal de los Derechos Humanos en el estado de Hidalgo.
En este 65 aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos, la principal exigencia en todo el mundo es la que ha señalado Phumzile Mlambo-Ngcuka, presidenta de ONU Mujeres: “Nuestras esperanzas en un mundo más justo, seguro y pacífico sólo pueden alcanzarse cuando existe respeto universal por la dignidad inherente y los derechos igualitarios de todas y todos quienes componemos la familia humana”.