Las teorías de la conspiración siempre tendrán fans, no importa qué tan extremas sean. Y también tendrán personajes que las usen a su favor, ya sea para manipular, conseguir poder o simplemente tener algo que subir a las redes sociales estos días, pero en el caso de QAnon, digamos que no es un buen momento para echarle más leña al fuego.
En pocas palabras, QAnon se considera como un grupo de personas que están ayudando a Trump a acabar con una secta de pedófilos que quieren apoderare del mundo, que a veces trabajan desde una pizzería y saben que “el racismo es necesario como una arma de protección”.
Ah, y entre sus miembros están Hillary, Bono y Bill Gates. Aterrador, pero nada nuevo. Lo que sí es nuevo es que su supuesto y “oculto” líder, Q, aparece con esa letra en diversos espacios de la vida pública. Particularmente en las redes sociales. Cuando se le preguntó a Trump al respecto solo dijo que sabía poco de ellos, pero que sabía que lo querían mucho. Wow.
Pues esta semana Facebook dio un revés en sus políticas de contenidos y decidió prohibir cualquier pagina de este grupo que se dedica a promover el odio, pero más bien busca ganar las elecciones del 3 de noviembre, por ahora. Prohibido. Nada de “Q”, aunque FB solo puede evitar que las cosas se suban por representante oficial del grupo. ¿Alguien sabe quién es? Y además, pueden evitar que se monetice con el tema, y para eso ya era hora. Pero la triste verdad es que esa no es la finalidad de contenidos como estos. Es una mucho más siniestra, perversa y su gasolina suele ser la estupidez. Que no nos engañen, son cosas peligrosas.
Twitter: @susana.moscatel