Hace unas semanas en Los Ángeles y San Diego era difícil creer que la gente que vive ahí tuvo las mismas y terribles experiencias que nosotros durante la pandemia. Aunque aún era obligatorio entrar a los locales cerrados con cubreboca y hasta Uber estaba rogándole a la gente que se vacunara (con un aventón gratis de ida y vuelta) las restricciones y la sana distancia eran las menos. Y mientras se reactivaba esa economía, vimos pruebas de que el mundo sí cambio. Como las largas filas para entrar a las tiendas de Amazon.
Sí, Amazon tiene tiendas ya en los centros comerciales de gran parte de EU, lo cual casi sabe a burla. Pero no lo es, es una especie de reconocimiento a las personas que aún quieren tener el libro en las manos antes de comprarlo. También es un lugar fácil para recoger mercancía, así que se entiende. Las tiendas quieren que compres en línea y recojas en el lugar.
El caso es que a partir de este martes veremos, al menos en el mundo del entretenimiento, qué cambió y cuál es la auténtica nueva (y cambiante) normalidad. Es hermoso saber que Disneyland ya puede abrir a capacidad completa, igual que el resto de los parques y resorts del estado, aunque seguirán con el sistema de reservaciones y habrá atracciones cerradas unos días. Seguiremos con la mirada puesta en qué ocurre en los cines, ahora que vienen los trancazos de verano, pero California está abierto. Aunque pareciera que México también y el bicho todavía está activo y no vamos tan avanzados con la vacunación como ellos. Cuidémonos, donde estemos. _
Susana Moscatel