Todos conocemos la historia de la princesa que teniendo al príncipe azul eligió al ogro del pantano, pero que quede claro que no lo hizo por feo, como esta última semana se ha hecho creer con la famosa tendencia del Shrekking en redes sociales.
Seguro que han escuchado de esta moda que consiste en que las chicas tienen citas o salen con alguien menos atractivo que ellas, que a veces ni les genera atracción física, y solo lo hacen porque creen que éstos las tratarán mejor y no les serán infieles debido a que se hizo una excepción y se les eligió. A mi parecer esa es una expectativa muy alejada de la realidad, pues todos pueden fallarte, sean guapos o no.
Esta tendencia afecta a la persona que elige pero también al elegido, y éste último ha manifestado su indignación por ser categorizado inferior o menos bello, sobre todo cuando se le juzga según estándares de belleza tradicionales, que por supuesto tienen estereotipos tanto en mujeres como en hombres.
Antes los varones seleccionaban a una mujer menos agraciada porque la más guapa no los elegía, y es curioso que las elegidas como segunda opción nunca manifestaron su inconformidad. Hoy pasa esta situación con los hombres y ellos han expresado su enojo y hasta han declarado sentirse objetos.
Sea hombre o mujer quien se siente superior o más bello que el otro, eso es una red flag en cualquier relación. Y esta tendencia pronostica una relación tóxica. Recordemos que una pareja es básicamente un par en igualdad, por lo tanto nadie puede creer que vale más que otro.
Esta situación hace analogía con Shrek y Fiona, porque todo mundo en la superficialidad cree que la princesa fue amable por elegir a un ogro y no a un príncipe. Pero olvidan que el cambio de la historia de las princesas surgió cuando Fiona se aceptó a ella misma y se amó con sus peculiaridades, que no necesariamente son malas, porque a su manera ella tenía belleza, sólo que era distinta a los estándares.
Recuerden, el verdadero acto de amor no fue elegir al ogro sino a sí misma. Así que si van a elegir pareja, antes que nada hay que amarse una misma y cuando esto se logre no se permitirá que un hombre las trate mal, sea guapo o no.