Debe ser motivo de mucho interés el Informe de Resultados de las Cuentas Públicas Estatal y Municipales del Ejercicio Fiscal 2020 que el Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México (OSFEM) entregó a la LXI Legislatura, donde revela observaciones por más de 28 mil millones de pesos, señalando que 20 mil 241 millones corresponden a entidades estatales y 8 mil 300 millones a municipales.
Destacan que los principales montos observados fueron a entes estatales, con más de 17 mil 84 millones de pesos; seguidos de entidades municipales con un monto de 8 mil 383 millones de pesos, mientras que los órganos autónomos quedaron con 3 mil 137 millones de pesos observados y el Poder Judicial con 20 millones 10 mil pesos. Todas estas cifras no indican inmediatamente mal manejo, pero se ponen bajo la lupa para que se esclarezca a precisión cuál fue su destino y en caso pertinente aplicar las medidas disciplinarias o de reparación del daño que se hubiera causado. No los perdamos de vista.
Sin embargo, han brotado cuestionamientos de este informe a simple vista; ¿por qué solo se auditaron 32 de los 125 municipios en el ejercicio? ¿Realmente no se auditaron gobiernos con señalamientos públicos múltiples por malos manejos y no se podía hacer más? ¿Quién decide y cómo se seleccionan los sujetos de auditoría? ¿Si fue una aplicación metodológica se podría también aplicar el criterio del auditor o auditora ante las incidencias o evidencias disponibles en el contexto? ¿Qué se tienen que cambiar en la Ley de Fiscalización para que este proceso sea aún más certero y no parezca que cabe la discrecionalidad para permitir la impunidad selectiva?
Asimismo, es de preguntarse ¿la comisión de vigilancia del Órgano Superior de Fiscalización podría hacer algo más frente a esta creciente inquietud social o está fuera de la jugada irremediablemente hasta que le den más atribuciones? ¿Será que la Junta de Coordinación Política de la Cámara de diputados a través de la propia comisión pueda dar paso a la realización de auditorías especiales por criterio o a solicitud de la ciudadanía?
Ojalá se decidan a fortalecer los procesos de auditoría y mejorar los tiempos de rendición de cuentas para darle mayor utilidad y significación para la gente.
PROVOCACIONES
#Ganadores: El paquete fiscal 2022 del Estado de México, aprobado el fin de semana pasado, se presume es producto de un riguroso análisis en el cual cada una de las fracciones parlamentarias de la Legislatura Mexiquense aseguran haber abogado por la atención eficaz de algún rubro de interés para la ciudadanía y se permitió sólo el endeudamiento mínimo indispensable de 5,500 millones de pesos cuya aplicación prometen vigilar rigurosamente, al igual que los nuevos créditos a contratar por los municipios para salir del atolladero que les heredaron a muchos. Ya veremos cómo se convierte en hechos lo presupuestado. Ojalá que ese ánimo de colaboración y análisis sensato entre poderes y niveles que hoy se presume, permita recuperar el tiempo y dé frutos, sin que se distraigan con la anticipada efervescencia por la elección del 2023.
Óscar Glenn
@OscarGlenn