Hoy día de descanso, dispuesto así para conmemorar el Día del Trabajo. Como sea, se trata de pasarlo, si Usted puede, sin salir de la comodidad de casa, y si es indispensable salir a trabajar, como corresponde a servicios indispensables, hacerlo con menos tránsito en las vialidades y algo de comodidad en los transportes.
En el caso de las campañas políticas la actividad no se detiene. Así es la política. Mientras unos siguen, otros también. Y si algunos descansan, otros siguen trabajando. El tiempo es implacable y más en tiempos electorales. La ilusión del triunfo motiva.
El trabajo es pieza fundamental del orden social. Los derechos de los trabajadores se van incrementando para que sean el componente básico en lo individual y colectivo. Ha sido una lucha continua, por fortuna de avances y conquistas.
El trabajo nos ubica, interrelaciona, limita y conecta al dirigir el intercambio de la sociedad y el mercado. Una sociedad impulsa el empleo para lograr la integración individual y la colectividad.
Hoy escuchamos a trabajadores y sus familiares demandar indispensables servicios de salud, cumplimiento de prestaciones como es la vivienda accesible y digna, el apoyo económico para el transporte y la recreación, la capacitación, la nutrición, el deporte, pensiones justas y suficientes, entre otros reclamos. Todo ello va creando una nueva cultura del trabajo, a partir de la adaptación, para evitar la desocupación y la precarización, que debe ser protegida por el Estado, con la responsabilidad de los empleadores y de los propios trabajadores.
El trabajador en el mundo lucha permanentemente por mejores condiciones laborales y se van constituyendo en ejemplo a seguir. Es la construcción de esa nueva cultura del trabajo que tiene características materiales e intelectuales dinámicas, porque constituyen aspectos relativos al trabajo como actividad humana.
Como podemos observar, los tratados comerciales que ha celebrado nuestro país se han convertido en instrumento estratégico para eliminar barreras al flujo de bienes, servicios y capital, y resultan influyentes formas de legislar desde lo internacional, porque pueden forzar reformas necesarias que podrían ser más lentas en lo interior. Así vamos y conmemoramos el Día del Trabajo.