Vaya partido el que nos regalaron el domingo Novak Djokovic y Roger Federer en la final de Wimbledon. Casi cinco horas de un tenis excepcional, exquisito, digno de dos de los mejores jugadores de este deporte en toda la historia. Al final, Nole se llevó la victoria en un duelo que se definió en muerte súbita y en cinco sets, con la cual celebró su quinto título en el pasto sagrado del All England Lawn Tennis Club.
De esta manera el serbio de 32 años llegó a 16 trofeos de Grand Slam en su carrera; ha ganado cuatro de los últimos cinco ‘grandes’ que se han disputado, es el tenista número uno del mundo en la ranking de la ATP y ya tiene ganado un lugar en la historia del llamado deporte blanco.
Sin embargo, a pesar de calidad y categoría, Novak no termina por ganarse el cariño de la mayoría de la gente. El domingo, en muchos pasajes del partido, los aficionados coreaban el Roger, Roger, demostrando su apoyo al tenista suizo, máximo ganador de GS.
De igual manera, en todas las canchas donde aparece Rafael Nadal, quien tiene 18 GS en su haber, el público se le entrega al de Manacor.
Djokovic tiene 16 GS y por el estado físico y de salud que tiene, y por supuesto a su innegable calidad, el Trueno de Belgrado, como escribió en MILENIO Xavier Velasco, tiene todo para llegar a 20 ‘grandes’ en su trayectoria, al igual que Rafa, aunque el español seguramente lo conseguirá con un par de campeonatos en la arcilla de Roland garros, donde no le gana nadie.
De hecho, a menos que no sufra una lesión importante, creo que The Djoker en algún momento será el jugador con más títulos de Grand Slam en la historia. A sus casi 38 años, Federer demostró que tiene el tenis para seguir jugando al menos un par de temporadas más y pelear por uno o dos ‘grandes’ más, pero el serbio tiene al menos un lustro más en el más alto nivel.
Quizá esos desplantes que Novak llega a mostrar en algunos partidos cuando las cosas no le salen bien al gritar o golpear la raqueta contra el piso es lo que a la gente no le gusta para arroparlo como lo hacen con Roger y Rafa. No lo sé.
Lo único cierto es que Novak Djokovic está en el mejor momento de su carrera, varios títulos más de Grand Slam engalanarán su sala de trofeos, pero no puede ganarse el corazón de los aficionados.