Decía Martin Heidegger, el conocido aunque controvertido filósofo alemán, que cuando nacemos, sencillamente somos “arrojados al mundo”.
Esta hiperbólica frase puede parecernos desagradable, pero lo cierto es que llegamos al mundo sin un manual para vivir, por lo que a base de prueba y error vamos viviendo, improvisando y elaborando nuestro propio manual personal, para lo cual y con suerte, la cultura familiar nos aportará las bases necesarias, para “aprender a caminar solos por la vida”, bases con frecuencia insuficientes, debido quizá a que también padres y abuelos en su formación fueron remolcando sus propias carencias.
Se Inicia entonces un largo camino de aprendizaje en el que a fuerza de buenas y malas experiencias, vamos creciendo y asimilando toda clase de conocimientos que creemos nos son útiles, para luego más adelante y en cierto momento inevitablemente preguntarnos:
¿Quiénes somos?; ¿de dónde venimos?; ¿a dónde vamos? o ¿para qué estamos aquí?
No hay respuestas y por lo común tampoco tiempo para buscarlas, pues estamos demasiado ocupados creciendo y aprendiendo a sobrevivir física y emocionalmente, en un mundo híper revolucionado que parece girar cada día rápido, en el que se vive cada vez más de prisa y no nos deja tiempo para reflexionar.
Y es viviendo en esa prisa, como perdemos la percepción clara y consciente de nuestros minutos, horas y días de vida, para luego, cuando menos lo esperamos, darnos cuenta que nos hallamos en el umbral del tercer tercio de vida.
Entonces buscamos en ese viejo manual de vida que fuimos elaborando: “cómo vivir la vejez”, pero no encontramos respuestas y nos damos cuenta que en adelante también tendremos que improvisar, pues cada etapa de vida plantea diferentes retos que ameritan distintas soluciones.
La vida es un misterio para vivirlo y si bien las arriba citadas preguntas filosóficas no tienen respuesta, una variante de ellas puede sernos útil en ese tercer tercio de la vida, si podemos encontrar una respuesta plena y satisfactoria, a la pregunta: ¿para qué he estado y para que seguir estando aquí?
