Que se intensifican estos días restantes de campaña y ambas opciones están abriendo sus últimas cartas: la 4T de Delfina Gómez sabe de la capacidad de los operadores priistas y llama a resistir tentaciones por posibles prebendas que comprometan el voto; por su parte, Alejandra del Moral quizá ya percibe haber llegado al tope en amarrar la lealtad de los simpatizantes del PRI, PAN y PRD, y perfila que arreciará la promoción entre los indecisos, el número que le hace falta.
Que otro factor que es previsible es el de la guerra sucia. Ahora circulan más trampas en las “benditas” redes sociales y plataformas digitales, por ejemplo “noticias” como la de Ricardo Anaya pidiendo a panistas no votar por el PRI, para salir con la sorpresa de que es una declaración en sus días como candidato presidencial. Un cuento viejo, pues, pero que abona en el intento de hacer ruido. La autoría intelectual de la estratagema no es difícil de adivinar.
Que en ese mismo sentido tergiversado está la falsa versión de que Karim Carvallo y Adán Barrón, ex alcaldes priistas migrados a Morena, cambiaron de color por instrucción del ex secretario de Gobierno Ernesto Nemer, tema desmentido contundentemente pues, en palabras del izcallense, “ni a su mamá le pide permiso”. Hay quienes observan que este tema más bien tiene tintes de fuego amigo. ¿Será?.
Que el Foro Internacional de Ciberseguridad y Protección de Datos Personales, promovido por el Poder Judicial mexiquense fue exitoso para generar propuestas concretas, denominadas guías legislativas, que se trabajarán para ser presentadas al Congreso local en pos de un entorno digital más seguro y confiable a través de la creación, actualización y fortalecimiento de las leyes existentes.
Que también muy productiva fue la participación del alcalde de Toluca, Raymundo Martínez, en el la XVII Sesión de la Asociación de Ciudades Capitales de México. Planteó un nuevo esquema de distribución fiscal con visión local, que entre otras cosas contempla una ampliación del porcentaje presupuestal para las administraciones municipales y creación de nuevos fondos, lo que se traduce en justicia para la labor de las autoridades más cercanas a la población.