Celebrar 108 años de la Opinión/Milenio Laguna es celebrar la vida misma. Es levantar la copa, como en las bodas de Caná, con el vino transformado en alegría compartida y en memoria viva.
Porque este aniversario no es únicamente una cifra, sino el pulso de generaciones que han confiado en estas páginas para informarse, reflexionar y sentirse acompañados desde los primeros laguneros que cultivaron el espíritu y vencieron al desierto.
En esta fiesta saludamos al nuevo director de Multimedios Coahuila y Durango, Alberto Braña Leal, con el deseo sincero de que su llegada marque un capítulo de fuerza y renovación.
También brindamos junto a compañeros de pluma entrañable —María Isabel Saldaña, Jaime Muñoz, Juan Noé Fernández, entre otros— que hacen de este espacio un mosaico de voces, un coro donde cada timbre aporta su propia verdad junto con un referente de la vida pública y política de la Comarca Lagunera, Don Jorge Torres Castillo.
Empecé escribiendo los miércoles, después pasé a los sábados y, desde hace una década, todos los domingos.
En este andar sumo más de 1,000 entregas a lo largo de 23 años, testimonio de una palabra que se volvió hábito, vocación y compromiso.
Deferencia y gratitud debo a mi coterránea Marcela Moreno, quien, al volver de España tras mis estudios de posgrado, me abrió generosamente las puertas de este espacio y confió en mi palabra como jefa de redacción en aquellos tiempos.
Gracias a ella, nació Ágora, nombre que evocaba al lugar griego donde se discutían las ideas con pasión y libertad. Sin línea o consigna.
En otro plano de mi memoria agradecida está mi maestro de poesía y oratoria, Salomón Athiye, quien sembró en mí la semilla de la palabra y me enseñó a respetarla como un arte mayor.
Escribir, decía Arthur Schopenhauer en El arte de pensar, es antes que nada la facultad de pensar con claridad.
Y en estos más de mil textos he comprendido que escribir no es solo narrar la realidad, sino darle forma, orden y sentido con las fes de erratas e imprecisiones de las que no soy infalible.
Un aniversario, sin embargo, no es solo motivo de brindis, sino también de reflexión. Y hoy me pregunto pensando en voz alta:
¿Qué significa sostener una voz crítica en medio de la saturación de discursos?
¿De qué manera podemos honrar la memoria de quienes construyeron este legado sin quedarnos atrapados en la nostalgia?
¿Cuál es el lugar del pensamiento escrito cuando la verdad parece diluirse entre estridencias y banalidades?
Porque, como decía Umberto Eco, la “legión de idiotas” encuentra hoy en las redes sociales un espacio para imponerse, y en el más perverso de los casos, lo hace desde el anonimato o la máscara de la cobardía, escudándose en un malentendido pretexto de libertad de expresión.
Ante esa distorsión, más necesarios se vuelven los medios que sostienen la crítica con responsabilidad.
La Opinión Milenio Laguna se mantiene de ese lado, con orgullo y responsabilidad acordes a la política de libertad y respeto del grupo Multimedios de la familia González.
Por eso hoy brindo: por el pasado que nos sostiene, por el presente que nos convoca y por el futuro que aún está por escribirse.
Larga vida a la Opinión Milenio Laguna: escuela de pensamiento, tribuna de voces y casa común de los laguneros.
@CUAUHTECARMONA