Hoy se estrena, en muchas salas cinematográficas, “Heroico”, una de las películas más valientes que jamás se hayan hecho en la historia de nuestro país.
¿Por qué? Porque dice horrores sobre el ejército mexicano que antes hubieran sido inimaginables.
Si esto se hubiera filmado en otro momento histórico, no sólo la película hubiera sido destruida. Sus responsables hubieran aparecido muertos al día siguiente de su presentación.
Cualquier cosa que usted haya escuchado sobre corrupción en el gobierno o sobre pederastia en la Iglesia Católica es nada en comparación con lo que aquí se denuncia.
Yo, que pertenezco a una generación que conoció la censura, los vetos y los castigos no puedo entender cómo le hizo David Zonana, autor de aquella joya monumental titulada “Mano de obra”, para escribir y dirigir esto.
Pero lo consiguió y yo quiero correr a felicitarlo, a profundizar en la parte estructural, en la construcción de los personajes y, por supuesto, en la dirección de tantos actores tan jóvenes.
Me gustaría conocer la opinión de la SEDENA, de los soldados y de los cadetes sobre este filme porque el que calla otorga y sería verdaderamente monstruoso que el ejército mexicano otorgara alrededor de esto tan delicado.
¿Cómo le describiría “Heroico” sin cometer el error de venderle trama?
Digamos que es una película de terror que narra lo que viven los cadetes en el Colegio Militar.
Y no, no estamos hablando de entrenamientos, obras de asistencia social ni de ninguna de esas cuestiones.
Estamos hablando de aberraciones, de tortura y de una violencia que termina por vincular a nuestros soldados con la peor parte de nuestra realidad.
Cuando usted llegue a la escena final entenderá la gran verdad que hay detrás del título de esta experiencia llena de aportaciones dramáticas y actorales que seguramente la harán acreedora a cualquier cantidad de reconocimientos internacionales.
Y digo internacionales porque como estamos en tiempos de cancelación, no me quiero ni imaginar la reacción de las multitudes nacionales, en las redes sociales, cuando vean las escenas en los baños, las secuencias en la alberca o lo del perro.
Hay muchas cosas que admiro en este trabajo. Primero, la astuta elaboración de un arco dramático perfecto.
Después, la lectura del ejército como una vía de empoderamiento para gente que probablemente jamás conseguiría nada en ninguna otra realidad.
Y al final todo ese juego de espejos entre soldados y cadetes, violaciones y defensa de los derechos humanos, héroes y antihéroes.
Fernando Cuautle (“Nuevo orden”, “Zero Zero Zero”, “El colapso”) es un actor al que he felicitado en un montón de ocasiones. Es enorme. De lo mejor que tenemos en México.
Bueno, aquí, su carrera se parte en dos. Ha nacido un nuevo dios en el firmamento artístico mexicano.
Santiago Sandoval y Esteban Caicedo son otros actorazos inmensos. Ovación de pie.
Ni hablar de la maestra Mónica del Carmen ni de muchas otras figuras que aparecen en esta cinta fotografiada por Carolina Costa, la reina que fotografió “El baile de los 41”.
Felicito públicamente a sus productores Marco Polo Constandse (“La caída”), Michel Franco (“La caja”), Jonas Kellagher (“Sundown”), José Nacif (“Un extraño enemigo”), Eréndira Núñez Larios (“La civil”), Sandra Paredes (“At Midnight”) y el mismo David Zonana (“Las hijas de abril”).
No cualquiera se atreve a hacer esto, mucho menos a hacerlo bien. ¡Bravo!
Luche con todas sus fuerzas por ir a los cines a ver “Heroico” antes de que ocurra alguna desgracia. Se va a asustar. De veras que sí.