Una televisión sin contenidos infantiles es una televisión condenada a la muerte.
¿Por qué? Porque las infancias son las audiencias del futuro. Porque en la infancia se forma, se crean los hábitos de consumo, los referentes culturales.
Si no me cree, hable con la generación Cri Cri, hable con la generación “Teatro fantástico”, hable con la generación “En familia con Chabelo”, hable con la generación “Burbujas”, hable con la generación “Bizbirije”, hable con la generación “Alegrijes y rebujos”.
Esas niñas y esos niños, que hoy son mamás, que hoy son papás, son los poseedores de un legado que las chiquitas y los chiquitos de hoy ya no están recibiendo o que al menos ya no están recibiendo igual por parte de la televisión mexicana.
Es en este punto donde yo le tengo que hacer un reconocimiento a Once Niñas y Niños, el canal de televisión especializado en contenidos infantiles de Canal Once del IPN (11.2).
Sí, también existe a manera de barra de programación dentro del Canal Once de toda la vida (11.1).
Estos genios de la producción no han dejado de crear contenidos para las pequeñas y los pequeños de nuestro país.
Me interesa mucho decirlo porque como hay una campaña de desprestigio hacia los medios públicos nacionales y muy específicamente en contra de Canal Once, no faltará quien piense cosas rarísimas de esta señal.
Por favor, no caiga en mentiras, en provocaciones. No juegue a hablemos mal de Canal Once y tenga la bondad de monitorear la programación completa de todos los canales y de todas las redes de esta multiplataforma.
Va a encontrar de todo para todas, para todos y para todes. A mí, lo que me interesa hoy es subrayar que Once Niñas y Niños sigue siendo el bastión de creación de contenidos infantiles más importante, profesional y creativo de todo México.
Decir esto cuando los medios públicos nacionales se han vuelto famosos por trabajar en condiciones insólitas de austeridad no es cualquier cosa.
En Once Niñas y Niños se sigue produciendo y a las pruebas me remito: “Próxima parada: Tenochtitlan”.
¿Qué es esto? Si estuviéramos hablando de Netflix, Disney+ o MAX, la prensa y los influencers estarían peleándose por desmenuzarlo.
Es una película corta, un especial, en donde algunos de los personajes que conducen Once Niñas y Niños viajan a la antigua Tenochtitlan para sensibilizar a las pequeñas y a los pequeños sobre la grandeza de nuestras raíces.
¡No sabe usted qué cosa tan más bonita! Ya la quisieran Wallace y Gromit de la BBC para un día domingo.
Resulta que Lupita, Alan y Staff (en caso de que usted no lo sepa, así se llaman los tres puppets que protagonizan esto) toman el metro de la Ciudad de México para ir a comprar un objeto muy chistoso al Centro Histórico.
Pero algo pasa cuando van por debajo de la tierra que terminan viajando en el tiempo y bajándose en la mismísima Tenochtitlan.
Agarre la onda de lo que debió haber sido elaborar todos esos escenarios, construir todas esas maquetas, con agua, canoas, atardeceres y hasta con personajes nuevos.
No le voy a contar más detalles para no arruinarle la experiencia. Lo más maravilloso es que esto es un trabajo del más alto nivel.
Por un lado, la gente de contenidos de Canal Once y de Once Niñas y Niños sabe cómo tratar a las audiencias, conoce su oficio y lo hace excelente.
Y, por el otro, no están sacándose las cosas de la manga. “Próxima parada: Tenochtitlan” tiene el respaldo de la Secretaría de Cultura, del Instituto Nacional de Antropología e Historia, del Museo Nacional de Antropología, del Museo del Templo Mayor, del Gobierno de la Ciudad de México y del Metro de la Ciudad de México.
¿Cuántos contenidos de cuántas plataformas pueden presumir de una conjunción así de instituciones? No me quiero imaginar las juntas, las discusiones. ¡Guau! Esto es hacer televisión en serio, televisión pública de verdad.
Y sí, de repente, mirando esta joya, aparece una historiadora. Pero no tiene usted una idea de lo bien que esta señora la habla a las niñas y a los niños, del respeto.
Quisiera tener cuatro veces más espacio para irme colaborador por colaborador, actriz por actriz, actor por actor.
“Próxima parada: Tenochtitlan” es uno de los mejores regalos para este mes de abril, que es el mes de las niñas y de los niños, pero también para la capital de nuestra nación.
México entero está celebrando los primeros 700 años de la fundación de Tenochtitlan. Este contenido forma parte de los festejos.
La próxima vez que le hablen mal de los medios públicos, de Canal Once o de su gente, acuérdese de esto que le estoy diciendo y restriégueselo en la cara a quien la quiso, a quien lo quiso engañar.
Se necesita una vocación a prueba de balas para hacer contenidos tan hermosos en estos tiempos tan complicados y estas mujeres, estos hombres, de veras que los están haciendo y los están haciendo bien.
Luche con todas sus fuerzas por ver Once Niñas y Niños, y por gozar con “Próxima parada: Tenochtitlan”. Lo va a encontrar muy fácilmente y gratis en YouTube. Le va a gustar. De veras que sí.