El Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) 2026 incorporó por primera vez un anexo transversal, con el objetivo de visibilizar el conjunto de recursos destinados a programas sociales relacionados con el Sistema Nacional de Cuidados, pero sin necesidad de invertir más.
Distribución del anexo
De acuerdo con el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), esta estrategia contaría con un gasto que podría contribuir a una sociedad del cuidado, con 466 mil 674.9 millones de pesos, equivalente a 4.6 por ciento del gasto neto total y 1.2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
Sin embargo, el CIEP señaló que el diseño de este instrumento plantea interrogantes respecto a los programas incluidos, el alcance de los recursos y la forma en que esto puede contribuir a la consolidación de un sistema integral de cuidados.
Indicó que esta estrategia se configura de programas existentes, sin recursos adicionales ni una nueva estrategia de política pública.
El CIEP indicó que los recursos se concentran de manera particular y tres programas representan más de 80 por ciento del total:
- Beca Universal para Educación Básica Rita Cetina: 27.7 por ciento
- Servicios de Atención a la Salud del IMSS: 27.2 por ciento
- Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores: 26.4 por ciento
Mientras que a nivel institucional, la mayor parte del gasto se encuentra en tres instituciones, que en conjunto concentran 97.6 por ciento de los recursos del anexo:
- Secretaría de Bienestar: 36.9 por ciento
- Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS): 31.6 por ciento
- Secretaría de Educación Pública (SEP): 29.2 por ciento
Servicios públicos y su infraestructura
En cuanto a los programas identificados con potencial para integrar un SNC, es decir, que tienen una vinculación directa con los cuidados, el CIEP señaló que concentrarían un gasto de 38 mil 596.1 millones de pesos.
“Este monto representaría una disminución de 18.6 por ciento en términos reales respecto a lo aprobado en 2025, evidenciando que, a pesar de la creación del anexo, los programas directamente vinculados a los cuidados registrarían una disminución en el gasto”, dijo.
De acuerdo con el CIEP, la eliminación o fusión de programas que tenían objetivos cercanos a los cuidados genera un panorama que podría dificultar el seguimiento de estos recursos.
“Estas decisiones podrían afectar de manera significativa a poblaciones como mujeres cuidadoras, niñas, niños, adolescentes, personas adultas mayores y personas con discapacidad, cuya situación de vulnerabilidad podría agravarse al limitarse aún más su acceso a servicios públicos de cuidado”, dijo.
“Asegurar que los programas presupuestarios que contribuyen a la sociedad del cuidado incluyan perspectiva de género y atiendan de manera efectiva a la población que requiere y provee cuidado aún es materia pendiente”, agregó.
Destacó que la política de cuidados enfrenta el desafío de ir más allá de las transferencias monetarias y consolidar la infraestructura de los servicios públicos que permitan reducir, redistribuir y remunerar el trabajo de cuidados en todo el país.
“Para ello se requiere no solo mayor financiamiento, sino también una planeación que alinee el gasto con metas de igualdad y justicia social”, concluyó.
AG