La región de Norteamérica tiene un reto importante, que va más allá de la relación política y económica, es la creación de una identidad compartida que genere prosperidad para las tres naciones que la conforma: México, Estados Unidos y Canadá.
Ejecutivos y expertos en MILENIO Foros “Promotores de Norteamérica” destacaron que es importante que se desarrolle esta cohesión cultural debido al gran cruce de migrantes, dependencia alimentaria y necesidad de mejorar la calidad de vida de las personas que viven en la zona.
El director general de Dalton Motors, Juan Carlos Rodríguez, destacó que somos más que un gran mercado, pues la relación va más allá de la producción manufacturera compartida como es el sector automotriz.
“Por ejemplo, la industria automotriz vale 1.2 billones de dólares, alrededor de 5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos, pero a veces nos quedamos nada más en la parte productiva. Los distribuidores somos un multiplicador, porque nos acercamos a cada región de los tres países y generamos prosperidad en todas las localidades”, afirmó.
El director ejecutivo de la US-Mexico Foundation, Enrique Perret, respaldó esta visión, destacando que no hay relación más importante para los tres países que la construida durante décadas entre ellos.
“Definitivamente para el ciudadano americano la relación con Canadá y México es por mucho la que más le impacta, digamos que por su educación, consumo, cultura, por muchas otras cosas. Al ciudadano mexicano, definitivamente el país que más impacta en la vida diaria es Estados Unidos”, señaló.
Interdependencia regional
En este sentido, expuso que los datos reflejan esa interdependencia entre la región, debido a que 1.5 millones de personas cruzan la frontera de México, lo que equivale a la población total de algunos países.
Recordó que el acuerdo de comercio trilateral que entró en vigor en 1994, transformó la manera de hacer negocios y de relacionarse en la región, el cual se había denominado Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
“A lo mejor Canadian Pacific Kansas City (CPKC) no sería la gran empresa sin este acuerdo comercial, y a lo mejor Dalton no estaría en California si no hubiera sido por el tratado. Yo no hubiera estudiado negocios internacionales si no hubiera sido por él”, enfatizó.
“El próximo año viene el Mundial norteamericano, ya que los tres países vamos a estar siendo anfitriones de un solo torneo. Vamos a tener que homologar muchas cosas y ese es un claro ejemplo de un objetivo común: los tres países queremos que sea la mejor Copa del Mundo en la historia y tenemos que trabajar por eso”, destacó.
Seguridad alimentaria
Parte de la importante relación de Norteamérica es la necesidad que tienen entre países de cuidar su seguridad alimentaria, pues su relación comercial asegura que los mercados cuenten con frutas, verduras y proteínas disponibles.
Miguel Ángel Curiel, vicepresidente y gerente general de la firma de berries Driscoll´s México, resaltó que la industria del alimento fresco de la zona de Norteamérica tiene un valor aproximado de 8 mil millones dólares, de los cuales el país aporta alrededor de 50 por ciento del mercado de berries, que se divide:
-3 mil 500 millones en fresas,
-mil 250 millones en frambuesas
-851 millones en zarzamoras
“Al hablar de Norteamérica, no se puede evitar pensar en el mercado de consumo y las propuestas de valor. El rol que estamos jugando como industria, es ofrecer alimentos frescos”, comentó.
Curiel destacó que la producción de berries es un ejemplo de la complementariedad agrícola entre Estados Unidos, México y Canadá, ya que cada país enfrenta limitaciones climáticas distintas que se equilibran dentro del bloque.
Beneficios compartidos
Por otro parte, Oscar del Cueto, presidente y representante ejecutivo de Canadian Pacific Kansas City (CPKC) de México, explicó que empresas como la suya, que laboran en las tres naciones, permite un crecimiento sostenido de la región, buscando el beneficio repartido entre los integrantes de la zona.
Destacó que actualmente CPKC conecta más de 14 puertos de las naciones y dos fronteras estratégicas, entre ellas la de Nuevo Laredo, donde se inauguró el segundo puente ferroviario que duplicará la capacidad de carga.
“Estamos invirtiendo también en patios y en la integración de aduanas mexicanas y estadounidenses en la misma oficina, compartiendo sistemas de monitoreo para agilizar el intercambio comercial”, dijo.
También señaló que la empresa impulsa la integración aduanera entre México y Estados Unidos, con sistemas de monitoreo compartidos para agilizar los flujos comerciales.