Las intensas lluvias registradas en los últimos días en el municipio de Pénjamo provocaron el desbordamiento del río Lerma, lo que derivó en severas inundaciones en la comunidad de Santa Ana Pacueco.
El nivel del agua alcanzó hasta un metro de altura en algunas viviendas, afectando a por lo menos 263 personas.
De ese total, únicamente 15 decidieron abandonar temporalmente sus hogares para refugiarse en un albergue habilitado en el salón de eventos Capri, donde elementos de la Guardia Nacional y Protección Civil colocaron 30 colchonetas con cobijas y almohadas como parte de la aplicación del Plan DN-III-E.
El resto de los afectados pasó la noche en medio del agua que permanecía en sus casas, pese a las medidas improvisadas con costales de tierra.
“Perdimos colchones, muebles y hasta el refrigerador”
Rebeca Cano, una de las habitantes de la zona, relató que la creciente del río Lerma dejó su vivienda inhabitable y sin condiciones para resguardar a sus cuatro hijos.
“Tenemos todos los colchones mojados y pues en dónde dormimos, así nos acostamos arriba, pero todos los colchones se nos mojaron, el refrigerador se nos echó a perder y yo lo ocupo porque ahí guardo la leche a la niña”, expresó.
La afectada recordó que desde hace 13 años no vivía una situación similar, aunque ahora consideró que el daño es más grave, ya que además de perder pertenencias, teme por la seguridad de su familia.
Otra de las afectadas, Marisela Barajas, explicó que el agua dañó sus muebles, zapatos y sillones, además de provocar un fuerte olor en su hogar.
“Lo que quisiéramos es que ya no volviera a subir mucho el agua porque la gente está espantada, ya nada más vemos que llueve y piensa uno que se va a venir mucha agua y ya le da a la gente mucho miedo”, dijo.

Apoyo y acciones de emergencia
La Guardia Nacional informó que, con la activación del Plan DN-III-E, se realizaron distintas acciones para auxiliar a la comunidad de Santa Ana Pacueco, entre ellas el rescate de pertenencias y animales, la limpieza de calles y la liberación de un vehículo que había quedado atascado en un camino de terracería.
Las autoridades municipales y estatales continúan en la zona para evaluar los daños materiales y definir los apoyos que se brindarán a las familias que resultaron damnificadas.