Las curtidoras de Guanajuato enfrentan un momento complicado debido a las complejidades económicas globales, lo que ha obligado a algunas empresas del sector a realizar despidos de hasta un 20 por ciento, informó Vicente Laud, presidente de la Cámara de la Industria de Curtiduría del Estado.
Comentó que, además de la imposición de gravámenes, el sector se ha visto afectado por la competencia desleal y la creciente apuesta por materiales sintéticos en lugar de piel en la fabricación de ciertos productos, como calzado y bolsos, entre otros.
"En cuanto a los empleos, desafortunadamente, al tener ocupada apenas el 60 por ciento de nuestra capacidad instalada, nos hemos visto en la obligación de realizar algunos despidos en distintas unidades de producción".
"Esto está muy polarizado: las tenerías dedicadas a la exportación, al sector automotriz o a pieles de alta calidad están trabajando al 90 por ciento de su capacidad, pero las que atienden al mercado nacional y a la industria del calzado están muy bajas, casi a la mitad de ese porcentaje", explicó Laud.
Asimismo dijo que "en la Cámara hemos hecho un llamado para reducir al mínimo el personal despedido, pero según nuestros últimos cálculos, se han realizado reducciones de entre el 15 y 20 por ciento en las plantillas".
El presidente señaló que esta cifra incluye tanto puestos directos como indirectos, lo que ha generado una baja en la producción. Aunque no ha sido drástica, representa un impacto preocupante.
"Estas unidades de producción funcionan como eslabones de una cadena. Por ejemplo, las plantas de secado están prácticamente trabajando al 90 o 100 por ciento de su capacidad, pero no ocurre lo mismo con las plantas de acabado. Insisto, las orientadas al sector calzado lo están pasando mal", indicó.
Vicente Laud agregó que la Cámara de la Industria de Curtiduría del Estado de Guanajuato ha reiterado su compromiso de buscar estrategias para mitigar el impacto de esta crisis, como la diversificación de mercados y la búsqueda de apoyos gubernamentales; sin embargo, el camino luce complejo.
El presidente concluyó que la rápida implementación de políticas que fomenten el uso de piel y combatan la competencia desleal es esencial para revertir esta tendencia.