Gaza mueve mexicanos, el Mundial pide tregua
México siempre viaja con exceso de equipaje. Allá van seis connacionales en una flotilla rumbo a Gaza cargando no sólo medicinas y víveres, sino también símbolos: la Virgen de Guadalupe, la rebeldía zapatista tatuada en las mochilas y la consigna feminista marcada en la piel. Van a romper un cerco con la bandera tricolor como escudo y con la certeza de que en este país la solidaridad es deporte. Hablamos con ellas y ellos.
Mientras ellos desafían a Netanyahu, en la sierra de Sinaloa la guerra cumple un año como si fuera un mal aniversario. La Mayiza contra “Los Chapitos” suena a comedia de enredos, pero la factura es tragedia: pueblos arrasados, niños acribillados. Nadie pidió esta película y todos terminamos viéndola a todo color.
Por otro lado, la captura del Mencho parece depender del calendario de la FIFA. No es broma: el país podría entrar en “tregua mundialista” porque los funcionarios mexicanos entienden que la caída del capo podría descomponer la pax en Jalisco, una de las sedes del torneo de futbol.
Y entre tanta guerra, un teléfono vibra desde el pasado. Septiembre del 85. Un hombre atrapado bajo toneladas de concreto logra marcar un número al azar. Contesta la periodista Patricia Vega. Del otro lado, una voz que sabe que se le acaba el aire y pide sólo eso: despedirse de alguien. No hay metáfora más brutal sobre lo que somos: sobrevivientes conectados por azar.
En DOMINGA contamos estas historias porque este país es un rompecabezas donde las piezas son balas, vírgenes, sismos y mundialitos. Nuestro deber es narrarlo con crudeza y con rabia, porque alguien tiene que dejar constancia de que aquí se navega con la fe de los peregrinos y se sobrevive con la mordacidad de los condenados.
@dominga_milenio