La pensión para adultos mayores sería accesible desde los 65 años y aumentaría año con año si se aprueba esta propuesta que el presidente Andrés Manuel López Obrador compartió como parte de su último paquete de reformas en el marco del 107 aniversario de la Constitución mexicana.
Actualmente el programa entrega un apoyo económico de 6 mil pesos a todos los adultos mayores de 68 años de todo el país con una excepción a aquellos que viven en municipios integrantes de pueblos indígenas que pueden acceder a esta pensión desde los 65.
Un documento adquirido por MILENIO que contendría la iniciativa que se publicará en el Diario Oficial de la Federación revela este proyecto que también contemplaría a las personas con alguna discapacidad.
"Que las personas menores de 65 años que viven con discapacidad tengan el derecho de recibir una pensión no contributiva, así como rehabilitación o habilitación cuando así lo requieran, y a partir de los 65 años, solo disfruten de la pensión no contributiva que se otorga a las personas adultas mayores", se lee en un documento.
Según el documento, este apoyo se extenderá a aproximadamente 3 millones de personas en 2030, a 4 millones en 2040 y a 4.5 millones en 2050.
Desde una conferencia en Palacio Nacional, el Presidente compartió su último paquete de 20 reformas constitucionales que será enviado a la Cámara de Diputados para su discusión.
"Las reformas que propongo buscan establecer derechos constitucionales y fortalecer ideales y principios relacionados con el humanismo, la justicia, la austeridad y la democracia", dijo el presidente López Obrador.
El Presidente también incluyó en este rubro los apoyos para personas con discapacidad, las cuales accederán a una pensión universal que aumentará cada año, de la misma manera que la de adultos mayores.
Esta otra reforma apelaría al Artículo primero constitucional que tras su modificación en 2011 prohíbe "toda discriminación motivada por origen étnico o nacional, el género, la edad, las discapacidades", entre otros aspectos.
A grandes rasgos, la iniciativa busca que quienes viven con discapacidad permanente o alcancen los 65 años de edad reciban una pensión no contributiva en vez de un apoyo económico, con el fin de reducir la brecha de desigualdad que afecta a este segmento social en México.
Además de estas también incluyó temas de su agenda como la desaparición de legisladores plurinominales, entes autónomos y la prohibición de venta de vapeadores, entre otros como parte de sus iniciativas para sacar de la Constitución las políticas implantadas en la "época neoliberal" o "neoporfirista".
aag