La secretaria del Bienestar e Igualdad Social de la Ciudad de México, Araceli Damián, confirmó que la Fiscalía capitalina investiga la existencia de otra posible víctima dentro de la Casa de las Mercedes, además de la joven de 17 años que denunció haber sido agredida por el hijo de la fundadora del albergue. Aclaró que los hechos no se consideran generalizados, sino casos específicos que deberán ser verificados por la autoridad ministerial.
Precisó que “la fiscalía ha reportado que tiene una posible víctima más y pues finalmente creo que tienen que agotarse las investigaciones para conocer, estamos suponiendo que se trata no de una cuestión generalizada sino de casos muy concretos”, por lo que se continúa la revisión de los espacios de resguardo infantil para detectar irregularidades o abusos.
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En entrevista para MILENIO Televisión con Samuel Cuervo, Damián González explicó que existe un comité de vigilancia conformado por la Secretaría de Bienestar, el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, así como integrantes de la Junta de Asistencia Privada y organizaciones civiles. “Se hacen recorridos, entrevistas con las menores y revisiones de instalaciones con psicólogos y trabajadores sociales”, detalló.
Explicó que durante una de esas inspecciones, una adolescente solicitó ser trasladada a otro sitio, tras denunciar una agresión. “Fue en ese momento cuando se activaron las medidas de protección” y el DIF gestionó el retiro gradual de los menores, aunque la directiva del albergue presentó un amparo para impedir la reubicación de ocho adolescentes.
La funcionaria puntualizó que el retiro de los menores respondió a una orden judicial de protección. “El juez dictaminó que las medidas cautelares tenían que ser para todas las niñas que estaban ubicadas en Casa de las Mercedes, no nada más las que estábamos tratando de mover en lo que se llevaban a cabo las investigaciones”, enfatizó.
Damián González informó que actualmente los menores se encuentran bajo custodia del DIF capitalino, con atención médica, alimentaria y psicológica. “Estamos con las niñas dando terapia de contención y viendo con las asociaciones de asistencia privada cuál es la mejor opción para ellas”.
La titular del Bienestar reconoció que los recientes hallazgos obligan a reforzar la supervisión en albergues, comprometiéndose a seguir fortaleciendo los protocolos porque aseguró “no existían hasta hace muy poco tiempo y se están llevando a cabo”. Recalcó que la vigilancia constante permitirá prevenir nuevas omisiones o actos de violencia contra menores.
LP
