Lo que era una actividad común, terminó convirtiéndose en tragedia, ya que dos niños de 11 y 10 años de edad perdieron la vida al interior de un baño de temazcal familiar en la junta auxiliar de San Miguel Canoa, en Puebla capital.
Los hechos ocurrieron cuando el padre de las víctimas se acercó a la bañera de vapor y los encontró inconscientes al interior, junto a su madre, quien también yacía en el piso.
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Familiares llamaron al número de emergencias 911 para solicitar la presencia de los cuerpos de emergencia, que después de unos minutos arribaron al domicilio ubicado en las calles Francisco I. Madero y Benito Juárez.
Aunque paramédicos del Servicio de Urgencias Médicas Avanzadas (SUMA) intentaron reanimar a los niños, éstos ya no contaban con signos vitales porque inhalaron altas concentraciones de monóxido de carbono, ya que el temazcal funciona con la quema de leña y hierbas.
Los socorristas sí lograron salvarle la vida a la madre de ambos, Montserrat N., de 34 años de edad, quien llegó en estado crítico al Hospital General del Norte por la cantidad de humo que inhaló.
Elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) municipal de Puebla llegaron al domicilio para confirmar la muerte de los niños, mientras que peritos de la Fiscalía General del Estado realizaron el levantamiento de los cuerpos para la necropsia de rigor.
La muerte de los infantes conmovió a la comunidad de San Miguel Canoa, cuya población es indígena en su mayoría y aún practica los baños de temazcal con regularidad, pese a los riesgos que conlleva.
Y es que en México, los temazcales son espacios reducidos en forma redonda o cuadrada donde se acumula vapor de agua caliente, sin embargo, la ausencia de oxígeno prolongada puede provocar mareos, vómitos y, en casos extremos, la muerte.
AAC
